La Junta de Castilla y León defendió ayer la implantación del «céntimo sanitario», que prevé gravar en 4,8 céntimos de litro los carburantes en la Comunidad Autónoma, por entender que «no había otra solución» ante la caída de ingresos para mantener la «calidad contrastada» y la sostenibilidad de los servicios básicos públicos. Este fue el argumento en el que insistió ayer el consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago-Juárez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno para justificar por qué se ha aprobado el proyecto de Ley de Medidas Tributarias, Administrativas y Financieras sin atender las propuestas de Cecale y agentes sociales, quienes han rechazado de plano ese incremento en el informe presentado por el Consejo Económico y Social (CES).

La Junta remite a las Cortes el proyecto de ley con la petición de su tramitación por urgencia para que la normativa pueda estar en vigor el 1 de marzo, lo que implica que este mes se habilite para su paso por los distintos trámites, si bien los plazo serán la mitad de los ordinarios.

De Santiago-Juárez reiteró que las medidas tributarias presentadas, en especial el «céntimo sanitario», que es la más cuestionada por los agentes sociales, son la solución para contar con más ingresos, dado que el Gobierno regional rechaza el aumento de la tarifa autonómica del IRPF o la restauración del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.

Ante esa caída de ingresos, explicó que han adoptado dos vías: la reducción del gasto corriente no vinculado a los servicios sociales, que recordó que se inició hace más de dos años, y la creación por primera vez en la historia de la Comunidad de nuevos impuestos, como es el ligado a los hidrocarburos y al medio ambiente (ecotasa a las eléctricas y tributo por tratamiento de residuos).

El Proyecto de Ley de Medidas Tributarias, Administrativas y Financieras incorpora, el denominado «céntimo sanitario», una tasa que ya existe en nueve de las trece autonomías de régimen común, incluidas las islas, y que en el caso castellanoleonés se aplicará a 4,8 céntimos por litro de gasolina, gasóleo de uso general y queroseno y 0,2 céntimos por tonelada de fuelóleo, lo que permitirá ingresar 140 millones de euros/año que se destinarán a la financiación de la sanidad. Además el documento establece la congelación de las retribuciones de los empleados públicos este año y el incremento de 2,5 horas en la jornada laboral que pasará de las 35 horas semanales actuales a las 37,5. Asimismo, la Junta recaudará en 2012 el Impuesto sobre el Patrimonio que permitirá ingresar 39 millones de euros, una cantidad que se destinará a financiar la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC) con el objetivo de que las rentas más altas ayuden a las familias más necesitadas.