La vallisoletana Catalina Montes Mozo, Premio Castilla y León de Valores Humanos 2005 por su defensa y lucha a favor de las personas más desfavorecidas, y por su labor en pro de la cultura, falleció esta mañana en torno a las 9.00 horas en Valladolid tras sufrir un infarto de miocardio. Impulsora de la Fundación Segundo y Santiago Montes, y promotora de la Ciudad Segundo Montes en El Salvador, su capilla ardiente se ha instalado desde las 17.30 horas en el Tanatorio San José, en la Avenida de Gijón, de Valladolid.

El pasado mes de noviembre, Catalina Montes realizó su último viaje a la región de Morazán, en la República de El Salvador, para proseguir con el proyecto que emprendió junto a su hermana Cristina en 1990 en memoria de su hermano Segundo, jesuita asesinado junto a otros cinco religiosos un año antes, para dar cobijo a los refugiados víctimas de la guerra civil salvadoreña. En la ciudad viven actualmente más de 12.000 personas, y gracias a la Fundación que Catalina presidía se han construido más de 400 casas, escuelas y campos de deporte en una zona que cuenta con alumbrado y agua potable.

"Nuestra vocación es estar allí, porque allí murió Segundo Montes y allí fue donde una comunidad de repatriados quiso fundar su ciudad Segundo Montes, en una zona asolada por la guerra, donde hubo 3.000 asesinados y la mayoría de la población eran mujeres, niños y ancianos. Era una sociedad muy desestructurada y por eso comenzamos a actuar allí, pero esto no quiere decir ni que sean los únicos, ni que haya que ir allí. Aquí también hay personas que sufren", explicaba ella misma a Ical hace un lustro.

De esa última expedición a El Salvador, la vallisoletana regresó con un estado de salud muy delicado, que ha ido empeorando a lo largo de los últimos meses hasta el trágico desenlace que se produjo esta mañana, cuando perdía la vida víctima de un fallo cardiaco.

Animosa hasta el final, su entierro tendrá lugar mañana a las 13.30 horas en el Cementerio de El Carmen, en Valladolid, y probablemente por la tarde se celebrará una misa en su recuerdo. Familiares y amigos todavía no han determinado cuándo tendrá lugar su funeral, según ha podido saber Ical.

Catalina Montes era catedrática de Filología Inglesa en la Universidad de Salamanca, donde impartió clase hasta pocos días antes de fallecer, y compaginaba su labor docente e investigadora con una intensa labor social que desarrollaba desde la Fundación Segundo y Santiago Montes.