Valladolid.- La consejera de Agricultura de la Junta, Silvia Clemente, destacó ayer que el nuevo marco de desarrollo local de la UE 2007-2013 permitirá la creación y consolidación de 5.500 empleos en el mundo rural de Castilla y León, gracias a una inversión de 390 millones, que se dirigirá a financiar 6.500 proyectos a desarrollar por 44 grupos de acción local (GAL) que abarcan el 96 por ciento del territorio de la Comunidad. Clemente, que clausuró una jornada en Valladolid sobre las "Estrategias de desarrollo local de Castilla y León 2007-2013", explicó que los fondos irán dirigidos principalmente a la creación de pequeñas y medianas empresas, a la potenciación de actividades vinculadas al turismo y a la puesta en valor de la artesanía alimentaria. Al respecto, recordó que próximamente presentará un plan de promoción de las industrias agroalimentarias, que incluirá la creación de una plataforma logística y de distribución para los productos artesanos que se presentará en el marco de la feria Alimentaria de Barcelona.

La consejera insistió en la apuesta de la Junta por el medio rural, un eje que marcó el presidente del Ejecutivo autonómico, Juan Vicente Herrera, dijo, para agregar que el reto es crear empleo a través de la modernización y la diversificación de actividades. Al respecto, subrayó el incremento de partidas regionales para mantener el marco de desarrollo local, que «han experimentado un crecimiento del 67 por ciento en nuestra financiación y que ha sido necesaria ante la rebaja sustancial de los fondos europeos que han mermado más de un 53 por ciento». Además, recordó que a finales de este trimestre, el Gobierno regional dará luz verde al Plan Autonómico de Desarrollo Rural, que contará con 2.000 millones de euros de financiación.

Cemente defendió la «tendencia clara de asentamiento poblacional y generación de empleo» vinculado al sector agrario y a la industria agroalimentaria, que dan trabajo a 120.000 personas en la región y generan más del seis por ciento del PIB. Además, trasladó que el marco actual supone una «nueva oportunidad» para los GAL, que están «vinculados con el territorio» y los agentes económicos y sociales de cada zona, y que deberán presentar sus alternativas antes del 1 de marzo, actuaciones seleccionará la Junta.

Balance del programa

La consejera de Agricultura alabó el «éxito» de estos programas, que arrancaron en 1989, con la participación sólo de ocho GAL, que desarrollaron actuaciones en el 12 por ciento de los municipios de Castilla y León. Sin embargo, en el último marco de programación (2000-2006), se involucraron 44 GAL, que llegaron al 98 por ciento de los municipios, lo que representa el 43 por ciento de la población y el 96 por ciento de la superficie regional.

Clemente precisó que el último marco generó 5.500 empleos, el 50 por ciento nuevos y la otra mitad, consolidados. Asimismo, de los puestos de trabajo creados el 60 por ciento correspondió a mujeres, y el 70 por ciento a menores de 40 años. «Estos datos confirman las alternativas de diversificación que las nuevas actividades impulsadas desde estos proyectos representan en el medio rural de la región». Además, concretó que el 24 por ciento del programa se dirigió a la creación de pymes y a actividades relacionadas con el turismo.