El pequeño Ahmed, un niño afgano de seis años, perdió su pierna por un disparo cuando tenía ocho meses. Un vídeo en el que aparece bailando tras recibir una nueva prótesis ha sido compartido más de 12.600 veces en Twitter y lleva más de 1,37 millones de reproducciones.

"Así es cómo ha cambiado su vida y cómo le ha hecho sonreír", dice en el tuit Roya Musawi, portavoz del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en Afganistán, refiriéndose a la felicidad del pequeño al probarse su nueva prótesis. El vídeo está grabado en el centro ortopédico que la organización tiene en la capital del país, Kabul, donde Ahmed lleva siendo tratado desde que tenía dos años.

El hogar de la familia del pequeño --compuesta por seis hermanas y tres hermanos-- está situado a casi 80 kilómetros de Kabul, en una aldea del distrito Baraki Barak, según ha explicado Musawi en declaraciones a Europa Press. El padre de Ahmed, además, padece una enfermedad que le obliga a estar encamado.

La provincia de Logar, en la que está Baraki Barak, es escenario habitual de ataques por parte de los talibán y de enfrentamientos entre los terroristas y las fuerzas armadas afganas, el último de ellos a finales de abril. Fue durante uno de estos choques entre Gobierno y extremistas cuando Ahmed recibió el disparo, según ha narrado Roya Musawi: "A Ahmed le dio una bala en la pierna cuando estaba con su hermana Salima, que también resultó herida".

Ahmed no ha olvidado aquel día. El niño recordó con Radio Free Europe / Radio Liberty cómo él "no dijo nada" y cómo su madre "lloraba y gritaba" pidiendo ayuda: "¡Mi hijo y mi hija están heridos!"

La prótesis con la que baila en el vídeo es la cuarta que recibe del CICR, pero no será la última: "Los niños menores de doce años necesitan habitualmente un reemplazo o un chequeo de sus prótesis cada tres o seis meses", ha explicado Mulkara Rahimi, fisioterapeuta del centro y autora del vídeo. "Si después de ocho meses les duele, o no se sienten cómodos con ella, les conseguimos otra prótesis", ha añadido.

Cada paciente tarda alrededor de una semana en ser dado de alta tras probarse una prótesis nueva. "Como fisioterapeutas tenemos la responsabilidad de comprobar y vigilar el ajuste, la extensión y la comodidad para andar de las prótesis, de enseñar a sus portadores cómo desplazarse de manera confortable y adaptar sus nuevas extremidades", ha aclarado Rahimi, que atiende o bien a mujeres o bien a niños menores de doce años.

En Afganistán hay más de un millón de personas que tienen algún tipo de discapacidad física, según el Comité Internacional de la Cruz Roja. Sólo durante el 2018 comenzó a tratar 1.310 nuevas personas que habían perdido alguna extremidad. En el centro ortopédico de Kabul, Rahimi atiende a entre 40 y 50 pacientes al día.