Un cachorro de bulldog francés de tan solo 10 meses murió durante un vuelo de la aerolínea estadounidense United Airlines que cubría el trayecto entre Houston y Nueva York, cuyo tiempo estimado es de tres horas y media, tras viajar en el compartimento del equipaje de mano.

La familia que llevaba al pequeño 'Papito', compuesta por una mujer, un niño de corta edad y un bebé, tenía la intención de situar el transportín a los pies de los asientos, pero tuvo que colocarlo en el compartimento superior ante la insistencia del personal de vuelo, incumpliendo de esta forma la política de la compañía, que señala que las mascotas deben viajar en su transportín y ser colocados bajo el asiento delantero.

El pequeño animal no pudo aguantar el largo trayecto en dicho espacio, destinado únicamente al transporte de maletas, dado el escaso flujo de aire que permitía el lugar y al no poder disponer de agua.

Los hechos han salido a la luz después de que una viajera, June Lara, lo denunciara en su cuenta de Facebook y acompañara la publicación de unas fotografías.

El suceso ha causado una ola de críticas en las redes sociales, ante las cuales la compañía ha respondido asumiendo el error de su personal de vuelo y reembolsando a la familia el importe íntegro de sus billetes. Además, según informa CNCB, la aerolínea se ofreció a pagar una necropsia para determinar las causas de la muerte.

La de 'Papito' no es la primera muerte animal que se produce en los aviones de United Airlines. De hecho, los datos del Departamento de Transporte de Estados Unidos señalan que a lo largo del pasado año fueron 18 los animales que perdieron la vida en alguno de estos vuelos y otros 13 resultaron heridos.n