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Urbanismo

Una casa colapsa en Benavente y los vecinos tienen que desalojar la suya

El Ayuntamiento decretó el estado de ruina inminente y dio un plazo de cinco días a la propiedad para demoler el inmueble hace casi un mes

Aspecto de la vivienda colapsada en la calle Alta de San Juan del Reloj.

Aspecto de la vivienda colapsada en la calle Alta de San Juan del Reloj. / J. A. G.

Benavente

El colapso de una casa baja en la calle Alta de San Juan del Reloj obligó el pasado mes de marzo a intervenir de oficio al Ayuntamiento, que decretó la ruina inminente de la vivienda, al parecer deshabitada, y dio un plazo de cinco días a la propiedad para que ejecutase una orden de demolición para garantizar las condiciones de seguridad de la calle y de las viviendas contiguas.

La Policía Local había advertido el mal estado del inmueble, valló y precintó el perímetro y aconsejó desalojar la vivienda contigua en la que vivían tres personas que han tenido que mudarse y dejar su domicilio. El número 31 colapsó poco después. afectando también al número 29. De esto hace ya casi un mes.

La Policía había detectado que parte de la fachada de la vivienda afectada estaba combada y corría el riesgo de desplome sobre la calle. Actuó el día 6 de marzo y cuatro días después los técnicos de urbanismo emitieron un informe declarando la ruina inminente, que constituye un estado de deterioro físico de un edificio que presenta un riesgo actual y real para la seguridad de las personas y los bienes.

Estado de la vivienda anterior al desplome.

Estado de la vivienda anterior al desplome. / J. A. G.

El informe técnico determinó la conveniencia de desalojar la vivienda afectada y de establecer una vallado perimetral de cuatro metros para garantizar el tránsito sin problemas, una medida que ya había acometido la Policía Local. A esta medidas acompañó la declaración de oficio de la ruina inminente con una orden de demolición de la casa. Ordenaba también el apuntalamiento de la fachada, extremo que no fue necesario tras desplomarse la parte de la construcción que amenazaba con venirse abajo.

En la misma línea, el Ayuntamiento dio un plazo de cinco días al propietario previamente identificado para que acometiese el derribo urgente de la vivienda que se había desplomado . Un mes después la situación en la zona sigue siendo la misma que la que se produjo tras el colapso de la casa. n

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