El Movimiento por el Tren Ruta de la Plata ha pedido este fin de semana al Gobierno en una concentración en Plasencia (Cáceres) que incluya la reapertura del trazado completo en la red transeuropea de transporte (RTE-T) antes del 31 de diciembre.
La asociación ha apostado por la conexión entre Plasencia-Astorga frente a la opción Plasencia-Salamanca-Medina, poniendo en valor la necesidad de “no aislar el polo logístico benaventano”.
“Creemos que este corredor periférico de la Plata está sufriendo un abandono de infraestructuras y queremos que la provincia de Zamora y el polo logístico de Benavente no queden aislados ni hacia el norte ni hasta el sur. Reivindicamos que se complete el trazado completo del ferrocarril Ruta de la Plata entre Gijón y Sevilla y es una urgencia para las comarcas más despobladas a lo largo del Corredor”, recoge el manifiesto difundido.
El portavoz del Movimiento, Julio César Pintos, recalcó ayer que es fundamental que el Gobierno proponga la inclusión de todo el trazado en la red básica europea y mostró las discrepancias que existen con el Corredor del Oeste-Ruta de la Plata.
Esta propuesta parte de “un lobbie” que tiene como prioridad incluir como red básica la conexión Plasencia-Salamanca y de ahí a León vía Medina del Campo-Valladolid-Palencia.
Contra los intereses de la provincia
La defienden todas las Cámaras de Comercio afectadas menos la zamorana, que no la respalda al ir “contra los intereses de la provincia”, en referencia a Benavente, según Pintos.
“Se habla de evitar el aislamiento del oeste peninsular y de nuevo se continúa aislando a una provincia como la de Zamora beneficiando también de nuevo a las grandes capitales de la región”, comunicó al Movimiento la Cámara de Comercio de Zamora.
El Movimiento por el Tren Ruta de la Plata, integrada en la Coordinadora Estatal por el Tren Público, Social y Sostenible y apoyada por Alianza por el Clima, defiende la vertebración del territorio de norte a sur y ve en el ferrocarril la forma más efectiva de reducir las emisiones contaminantes y de luchar contra la despoblación.
Pintos ha explicado que, en el caso de los tramos en los que la línea férrea se ha desmantelado, como ocurre entre Barcial del Barco, Benavente y La Bañeza, “es necesario que un estudio de viabilidad, que supone un gasto de 150.000 euros, determine si es preciso un nuevo itinerario o conviene usar el antiguo trazado”, que en la actualidad es una vía verde.
El Movimiento ha recibido la promesa de la inclusión de una partida no nominativa en los Presupuestos Generales del Estado para este fin.
Desde su cierre en 1985 no han faltado colectivos reivindicando este corredor que permitía un transporte público de personas y mercancías. El ferrocarril vertebra el territorio y su eficiencia energética es evidente, defiende.
