Camarzana de Tera da hoy el pistoletazo de salida a su semana de grandes fiestas en honor a Nuestra Señora de La Asunción, patrona de la localidad.

Tras la celebración, el pasado sábado, del tradicional desfile de gigantes y cabezudos, esta noche dan comienzo cinco días de eventos y actividades para todos los públicos. A partir de las 22:00 horas, el edificio Las Nieves, será el escenario del primero de los festejos de este fin de semana, con una gran cena romana y una actuación musical a cargo de Pahíno.

El sábado por la tarde, a partir de las 17:30 horas, tendrá lugar un mercadillo solidario en la pista de baile de la localidad. Tras ello, a partir de las 19:00, serán los mayores los protagonistas del evento, con la ya tradicional entrega de placas conmemorativas y de homenaje a los vecinos que cumplan o hayan cumplido 85 años durante este año. El día culminará por todo lo alto con un desfile de peñas con charanga y la actuación del grupo Top Líder.

Las actividades continuarán el domingo por la tarde, cuando les tocará el turno a los niños, que podrán divertirse en la plaza del edificio de usos múltiples con un parque de hinchables y un tobogán acuático.

El lunes, día grande de los festejos y festivo nacional, se celebrará la Santa Misa en honor a la patrona y por la tarde tendrá lugar la quincuagésima edición del desfile de carrozas para después terminar con Renovation Experience.

La semana de festejos terminará durante la jornada del martes, que comenzará con una carrera de cintas a partir de las 11:00 horas.

Después, a las 17:00 horas, darán comienzo los juegos infantiles en la Plaza del edificio de usos múltiples y, a partir de las 19:00 horas, tendrá lugar un partido de fútbol sala de “solteros contra casados”.

Camarzana de Tera cerrará sus grandes fiestas con la discoteca móvil Sonido, para terminar por todo lo alto cinco días que todos los vecinos de la localidad llevaban tres años esperando.

Este año 2022 se ha erigido como el verano de la vuelta a la vida, tras el parón que provocó la situación de pandemia. Ahora que todo eso parece ser cosa del pasado o, al menos, haber pasado a un segundo plano, ha quedado claro que nadie ha perdido la ilusión por volver a vivir los grandes días de su pueblo.