La Opinión de Zamora

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Medio Ambiente

La bajada de caudal pone en peligro los pozos de una urbanización junto al Tera

Piden la intervención de la Confederación Hidrográfica del Duero ante el descenso de la capa freática, que achacan a diversas causas

El río Tera en el puente de Micereces ayer. Lleva acusando desde la primavera el descenso de caudal. J. A. G.

El descenso del caudal de los ríos a su paso por la comarca, especialmente el Órbigo y el Tera, está comenzando a dejar sentir las primeras consecuencias.

Así lo están percibiendo especialmente en la urbanización El Tamaral, en la margen izquierda del Tera, en el puente de Micereces, donde se están registrando problemas en los pozos convencionales que suministran agua a una parte de las viviendas de la zona.

Este año está siendo especialmente seco y desde la primavera el caudal del Tera ha descendido notablemente. Lo dicen los vecinos aunque el caudal del río no engaña y menos desde que comenzó el verano.

Zona de urbanización El Tamaral, cuyos pozos se están secando. | J. A. G.

Los vecinos creen que la capa freática lleva años descendiendo pero desde hace semanas ya no surte a los pozos, que expulsan aire poniendo los motores en trance de quemarse si no se apagan. El agua tarda el volver al menos una hora.

Algunos afectados ya han pedido a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) que intervenga “para aumentar el caudal del río Tera y garantizarlo ahora y en el futuro y que no tengamos que vernos en circunstancias insoportables”.

Causas

Hace unos 15 años se extrajo grava aguas abajo del puente, a 1,5 kilómetros aproximadamente, y el fondo del cauce descendió. Este es uno de los hechos al que se achaca la situación actual, pero no es la única.

Creen que la captación de agua la presa del abastecimiento del Tera está detrayendo un importante caudal y que en la urbanización, algunos residentes han ejecutado sondeos a entre 50 y 100 metros de profundidad.

No deja de recordar uno de los afectados, que el rio Tera está regulado aguas arriba por las presas de Cernadilla, Valparaíso, y Nuestra Señora de Agavanzal, presas que explota la compañía Iberdrola “con la autorización de la Confederación Hidrográfica del Duero”.

El derecho de agua para boca y riego debería estar garantizado para los pozos legalizados”, clama este vecino de la urbanización, que advierte de que si los pozos se secan “la situación podría ser desesperada”.

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