El Ayuntamiento de Benavente ha impuesto una multa de 1.000 euros al vecino de la ciudad que arrancó para llevarse a su casa la iluminación del monumento del Toro Enmaromado las pasadas navidades y fue sorprendido por la Policía tras una llamada vecinal.

La instructora del expediente sancionador constata que los hechos reflejados en la denuncia son constitutivos de una infracción muy grave de la Ordenanza Cívica: “Realizar cualquier actuación que suponga destrucción o deterioro considerable de los bienes públicos y privados protegidos por esta Ordenanza, ya sea por: incendio, rotura, desgarro, suciedad o retirada o manipulación de elementos o piezas que afecten al uso del bien o a la seguridad de las personas”.

La infracción se ha sancionado con una multa de 1.000€ euros “atendiendo a la trascendencia social de los hechos y al valor de los bienes sobre los que se actuaba”. El infractor ni respondió a la notificación ni alegó ni designó a nadie para que alegara en su nombre durante la instrucción del expediente sancionador.