Las fiestas del Toro Enmaromado se han saldado con seis casos de violencia sexista y un detenido. En cuatro casos intervino el Punto Violeta. En otros dos la Guardia Civil, que detuvo a un hombre e instruyó diligencias que remitió al Juzgado.
El segundo caso con participación de la Guradia Civil afectó a una menor. En estas dos intervenciones colaboró también el Punto Violeta en labores de acompañamiento a las víctimas y en el caso de una de ella en la búsqueda de alojamiento en un hotel fuera de Benavente y lo hará en estos días, a través de la Concejalía de Bienestar Social en un punto de acogida.
El Punto Violeta, al margen de los dos casos en los que intervino colaborando con la Guardia Civil, ha realizado un primer balance de las fiestas y los resultados “son preocupantes”, según recoge en un informe.
A lo largo de la Semana Grande ha registrado cuatro casos relacionados con violencia de género en relaciones de pareja, tres de ellos, en parejas jóvenes. Se trata de relaciones basadas en violencia habitual “que se precipita en contextos de fiesta, ocio nocturno y consumo de alcohol y drogas”, según determina este primer balance.
El punto ha constatado la presencia de violencia de género a edades muy tempranas, entre los 16 y los 26 años, con una especial normalización de conductas violentas.
Esta realidad guarda relación con los datos registrados en el “Barómetro Juventud y Género 2021” del Centro de Investigación Reina Sofía de la FAD que analiza cómo perciben los jóvenes de 15 a 29 años las cuestiones de género, que concluye que un 20% de los jóvenes de 15 a 29 años niega que exista la violencia de género.
Desde el Punto Violeta se considera que es urgente “la necesidad de someter a análisis el actual modelo de fiestas centrado casi exclusivamente en los toros, el consumo de alcohol en la calle y la presencia de personas, en muchos casos, menores, hasta altas horas de la noche”, para avanzar hacia un modelo festivo más saludable, más ecológico, más educativo y con una propuesta de actividades suficientemente variada y diversificada para dar respuesta a las necesidades e intereses de todas las franjas de edad de la población.
"Es urgente la necesidad de someter a análisis el actual modelo de fiestas centrado casi exclusivamente en los toros, el consumo de alcohol en la calle y la presencia de personas, en muchos casos, menores, hasta altas horas de la noche".
Preocupa especialmente la presencia de menores hasta altas horas de la noche, jóvenes de entre 12 a 17 años hasta las cuatro y siete de la mañana, “en un contexto de normalización de prácticas adultas, basadas exclusivamente en el consumo de alcohol y que pone en riesgo a toda la sociedad, pero especialmente a mujeres, jóvenes, niñas y niños”.
El informe señala también la urgencia de una gestión responsable de las basuras y la necesidad de reforzar el reciclado en fiestas, con campañas de sensibilización e instalación de contenedores específicos para reforzar el reciclado de desperdicios en calles céntricas, peñas y establecimientos hosteleros.
Más conciencia social pero también negacionismo
La organización ha percibido, respecto a 2019, que ha aumentado la conciencia social contra la violencia de género y las agresiones sexistas por parte de la ciudadanía, “aunque también se han registrado, especialmente, por parte de hombres muy jóvenes y algunos adultos, posturas antiderechos, situaciones de resistencia social al avance de la igualdad y actos de acoso, violencia verbal y hostigamiento contra las personas voluntarias del Punto y las políticas de Igualdad por parte de las instituciones”. Algunas de estas acciones han puesto en riesgo a las personas voluntarias del Punto que no cuentan con seguridad directa.
Constata una mayor presencia y colaboración de la Policía local y la Guardia Civil aunque se percibió un descenso de la vigilancia en las calles a partir del miércoles, a pesar de que los casos de violencia de género registrados y otras situaciones de peleas y riesgo para la ciudadanía en las calles fueron aumentando progresivamente a lo largo de la semana, registrándose el mayor número de casos en la noche del viernes.
El Punto Violeta Municipal contra la Agresiones Sexistas en Fiestas, organizado por la Concejalía de Educación, Bienestar Social e Igualdad y coordinado por la Asociación de Mujeres Nuevas Ideas ha contado con un total de 36 personas voluntarias, 30 mujeres y 6 hombres, a turnos continuados de dos horas, desde las ocho de la tarde a las ocho de la mañana.
Los casos han revelado “la importancia del acompañamiento a las víctimas y a sus familiares en el largo proceso de testificales, a fin de evitar una revictimización para la mujer agredida y sus familias con largas horas de espera, falta de información y asesoramiento”.
Por ello, insiste el equipo en que las instituciones “deben acompañar las necesidades de las víctimas, primando el acompañamiento a sus necesidades, a la autonomía, y a su capacidad y toma de decisiones”.
