La Comisión de Seguimiento del Plan Territorial de Fomento de Benavente acordó ayer modificar el documento que lo sustenta para ampliar en un año más su periodo de vigencia “por precaución en el cumplimiento de plazos” y que pasará por lo tanto de 2022 a 2023, y aumentar los fondos para su ejecución, que finalmente se situarán en el entorno de los 12 millones de euros.
El Plan Territorial cuenta la aportación de tres millones por parte del Ayuntamiento de Benavente, de otros tres millones de la Diputación Provincial y de 3,36 millones de euros, de la Junta de Castilla y León.
Ya se conoce que la ejecución de las obras de los proyectos de urbanización y de reparcelación costará 10,6 millones de euros, cantidad a la hay que sumar al menos entre 1,1 y 1,2 millones de euros para el pago de expropiaciones.
La cantidad global resultante oscila entre 11,7 y 11,8 millones de euros, entre 2,5 y 2,6 millones de euros más de los 9,36 millones que figuran hoy por hoy en el documento.
Los representantes de la Junta de Castilla y León en la Comisión de Seguimiento han reiterado el compromiso del presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco, de aportar el dinero que sea necesario para la actuación.
"Estaremos ahí"
A finales de enero de este año, en una visita electoral a la ciudad, Mañueco aseguró que la Junta pondría 3,3 millones “en principio y como mínimo”, y dejó abierta la puerta a aumentar la ayuda si fuese necesario. “Se irán incrementando y se irán ampliando si son necesarios más proyectos”, dijo.
“Un plan industrial de estas características surge para un periodo determinado. Yo lo que puedo aquí reiterar y ratificar es que si acabado ese periodo, acabadas las inversiones, es necesario seguir apostando por Benavente y por el entorno de los municipios, de localidades próximas a Benavente, estaremos ahí, porque mi compromiso es generar actividad económica, creación de empleo y que haya población en todo el territorio de la comunidad autónoma”, agregó.
"Cronograma"
Si el compromiso se cumple, la Junta pasaría de aportar, los 3,3 millones ya comprometidos en el documento a ser la principal fuente de financiación aportando los seis millones de euros. El Ayuntamiento y la Diputación mantendrían los tres millones de euros comprometidos.
La modificación del Plan Territorial de Fomento incorporará un cronograma financiero actualizando el montante global y estableciendo la cantidad cierta que cada administración tendrá que aportar en cada anualidad.
Esta ha sido una de las decisiones del grupo de trabajo, que se reunió en septiembre por última vez. Ayer ha dado por casi finalizada la fase administrativa del Plan Territorial.
De hecho, el alcalde de Benavente, Luciano Huerga, ha anunciado que el proyecto de urbanización y de reparcelación será aprobado inicialmente en un Pleno que se convocará en los próximos días, así como el proyecto de expropiación de terrenos a los 14 propietarios que no han aceptado el sistema de cooperación propuesto.
Dado que para llevar a cabo la licitación de los proyectos es necesario contar con todos los fondos, la modificación del Plan Territorial y la determinación de las aportaciones deberán realizarse con celeridad y a lo largo de lo que queda de año. Las obras podrían comenzar en 2023, durarán 16 meses, y por lo tanto finalizarían en 2024.
La vigencia del PTF se había establecido hasta 2022, con los dos años siguientes para prórrogas y justificación. La Comisión ha considerado factible ampliarla a 2023 para “blindar” las fases de licitación, adjudicación, ejecución de obras y justificación de las subvenciones.
