El PP de Benavente critica el proceder del Ayuntamiento al sancionar a un trabajador por tres meses de empleo y sueldo, y que ahora “corrige” el Juzgado de lo Social al declarar “improcedente” la sanción establecida. Para los populares “según testimonios de responsables del Departamento, el trabajador había actuado buscando la agilización y el buen funcionamiento del Departamento de Recaudación, sin buscar el beneficio de nadie, sino el funcionamiento del servicio de la institución”.

Explican los populares que “el Ayuntamiento acusaba a este trabajador de dar de baja o condonación, de forma total o parcial, determinadas deudas de terceros con el Ayuntamiento, sin resolución formal. La cantidad total de todas estas operaciones realizadas durante el período comprendido entre los años 2013 al 2021, ascendía a 251,09 euros correspondientes a recargos y 303,81 euros a bajas, constando como causa de la baja “error”.

Las cantidades dadas de baja en Tesorería, en los casos analizados, correspondían a un total de 29 “recargos”, y no a “deudas de terceros”, como dijo el Ayuntamiento, para, según el PP, “acusar al trabajador de la comisión de una falta muy grave, tal y como refleja la sentencia. Así como que los administrados ya habían abonado el “pago principal”, a excepción de dos recibos relativos a sanciones del año 2016, cuyo dictado del decreto correspondía al departamento de Sanciones y no al de Tesorería”.

La explicación del concejal de Personal, José Mariño, que sale al paso de las críticas de la oposición, es bien distinta. Mariño señala que “se detectaron procedimientos irregulares, que no se corresponden con los procedimientos administrativos y los protocolos correspondientes y por tanto se procedió a abrir el expediente y un proceso de investigación que llevó a una resolución de ese expediente y a una sanción. Es decir se comprobó que se estaban levantando determinados recargos por este trabajador sin el correspondiente decreto o proceso administrativo. Aunque sea un error propio del Ayuntamiento, eso no se puede hacer”.

Para Mariño el PP avala procedimientos “erróneos, equivocados e ilegales”.

Para el PP lo sucedido responde realmente a decisiones que tienen que ver más con una “caza de brujas, con tufillo a represalia”, que a la defensa de los intereses del Ayuntamiento. Señalan que la investigación solo se hizo sobre este trabajador. Ante esto Mariño reprocha al PP esta crítica y asegura que “desde el equipo de Gobierno no se miran los colores políticos de los trabajadores municipales. Posiblemente de tufillo a represalia el PP tiene mucho que enseñarnos en esta materia. Es propio de la gestión popular”, sentenció.