Reforzar la protección de las personas más vulnerables y mejorar su bienestar y su calidad de vida es el objetivo que persigue el proyecto de digitalización previsto por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades en toda la red de centros públicos de atención a personas mayores, con discapacidad y dependencia, así como en centros de día y de menores, y de las unidades de valoración y atención a personas con discapacidad y dependencia. “Este proyecto implica dar un nuevo impulso al proceso de modernización de los servicios sociales y de implementación del modelo de atención a la Dependencia 5.0. Los primeros pasos se dieron ya el pasado año con la instalación de red WI-FI en los primeros 38 centros de mayores y de personas con discapacidad, una infraestructura a la que se destinaron tres millones de euros”.

Llegada de la consejera a la Residencia Mixta, acompañada por la delegada territorial (a la izquierda) y el alcalde (a la derecha). | E. P.

Esta tecnología facilita la conectividad entre los residentes y sus familias, especialmente útil durante los meses de confinamiento y aislamiento por la pandemia del coronavirus. Bien lo sabe Josefa, una residente del centro de Benavente que mostraba ayer, emocionada, cómo se maneja con las tecnologías y a través de una videollamada se puso en contacto con su nieta. La presentación se hizo en la sala de usos múltiples de la residencia donde accedieron tras tomar la temperatura a la entrada responsables de las instituciones y medios de comunicación.

Un residente explicando a la consejera algunas de sus necesidades en el centro de Benavente. | E. P.

Tras la implantación del WI-FI el siguiente paso es la aplicación de esta tecnología a nuevas funcionalidades. La Residencia Mixta ha sido elegida para el desarrollo de dos proyectos pilotos que la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades prevé ampliar a toda su red de centros públicos. Uno de estos proyectos es un sistema para el seguimiento de personas con problemas de orientación, denominado control de errantes, que supone monitorizar permanentemente a través de una pulsera conectada a redes inalámbricas, la posición de los usuarios. El otro proyecto que no está definitivamente implantado es el de la teleconsulta, que implica conectar los servicios del centro residencial con los centros hospitalarios, de modo que “haya una conexión diaria, en tiempo real, para cualquier consulta o duda sobre las personas que viven en las residencias. En caso de que esa persona determine que tiene que ser trasladada al hospital de referencia, tendría toda la historia hospitalaria del paciente, facilitando esa atención y una mayor interconexión entre los servicios de salud y la propia gestión de las residencias”, señaló Blanco.

La residencia de Benavente, además, va a recibir una inversión de tres millones de euros para la modernización de las instalaciones. “Ahora mismo estamos en fase de redacción de los pliegos para las posterior redacción del proyecto”, señaló Blanco. Modernización que conllevará la reducción de plazas de válidos. “La obra consistirá en adaptar las habitaciones, seis unidades de convivencia para adaptarla a la nueva legislación que estamos poniendo en marcha. Las unidades de convivencia son de entre 12 y 16 personas en cada uno de los módulos”.

La residencia benaventana tiene capacidad para 138 personas asistidas, 80 personas válidas. Las plazas de personas válidas se irán transformando con este nuevo modelo en plazas de personas asistidas.

Además las obras conllevarán el arreglo del comedor y otras salas comunes. “Todo esto entra dentro del objetivo que persigue el gobierno de Mañueco de dar ese impulso a los servicios sociales, la atención de calidad, centrada en las personas”.

El director territorial de Vodafone en Castilla y León, Miguel García, explicó que el de Benavente “es un proyecto pionero a nivel europeo porque es la primera vez que se pone la tecnología al servicio de los servicios sociales, que tiene mucho recorrido en lo que es la salud y el bienestar. Es un momento importante para España y el uso de tecnología va a hacer posible el desarrollo de proyectos de salud y bienestar”, explicó.

La consejera se refirió también en su visita a la situación actual de la evolución de la pandemia en las residencias de la Comunidad y explicó que en Castilla y León viven en centros residenciales 42.589 personas, y los residentes contagiados son 271, lo que supone un 0,6 por ciento de las personas que viven en residencias. De ellos, 257 son mayores y el resto son personas con discapacidad, “A veces perdemos el orden de magnitud de las cosas. No es ni siquiera el fallo vacunal, ya que la vacuna no es efectiva al cien por cien”, enfatizó. La consejera detalló también que en estos momentos el 85% de los casos, 218, se concentran en once centros de la Comunidad.