Los vándalos siguen haciendo de las suyas en Benavente. Esta vez el objeto de sus actos incívicos han sido los Jardines de la Mota. Concretamente, la zona conocida como La Rosaleda, donde han roto un árbol, han destrozado más de medio centenar de unidades de flor de temporada y han provocado daños en el sistema de riego. En concreto, han arrancado riegos de los parterres de sus ubicaciones. La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Benavente insiste en que estos trabajos de sustitución, reparaciones y mantenimiento suponen, además del “deterioro visual de las zonas de uso público”, un “importante coste para las arcas municipales”. En concreto, cada año la concejalía destina 60.000 euros a subsanar los destrozos provocados por los vándalos en mobiliario urbano y jardines, así como en la reposición y las horas que destinan a estos trabajos los operarios municipales. De hecho, añade, el tiempo que dedican a este menester no lo pueden emplear en “otras necesidades de la ciudad”. Por este motivo, el Ayuntamiento vuelve a apelar al civismo y hace hincapié en la importancia que tiene la educación cívica que, añaden, “se debe enseñar y aprender en el propio núcleo familiar”. “Desde la Concejalía de Medio Ambiente se vuelve a apelar al civismo de toda la ciudadanía para que este tipo de conductas vandálicas, totalmente gratuitas, tengan respuesta tanto a nivel municipal como a nivel familiar”, confían.