El alivio en los datos de contagios por COVID que se reflejaban ayer en Benavente no permitirá, sin embargo, que la ciudad pueda reabrir el interior de la hostelería y las salas de apuestas. Y no lo hará hasta el próximo martes. Algo similar ha pasado ya en la localidad soriana de Almazán, que a pesar de situar la incidencia acumulada a 14 días por debajo de los 150 casos por cada 100.000 habitantes, se ha mantenido en la lista de municipios con estas medidas extraordinarias porque la Administración regional considera que debe cumplir el plazo de quince días.

Según los datos facilitados por la Junta de Castilla y León en la jornada de ayer no se ha registrado en Benavente ningún nuevo caso positivo por COVID. En cuanto a la cifra de incidencia acumulada por COVID en Benavente, a 14 días, había bajado ayer de 168 casos a 134,93. Atendiendo a los datos que hacen referencia a los siete días, las cifras se situaban ayer en una incidencia de 56,22 casos por cada 100.000 habitantes.

Ante estos nuevos datos, el alcalde de Benavente, Luciano Huerga, reflejaba ayer su indignación por la determinación de la Administración regional de “castigar a un sector como el hostelero, a pesar de que la incidencia está, ahora sí, por debajo de 150 casos, y castigar con ello a la economía de esta ciudad. Estas no son medidas consecuentes, ni coherentes”.

Haciendo referencia a la contestación que la consejera de Sanidad, Verónica Casado, dio en rueda de prensa al ser preguntada por los requerimientos e la Alcaldía para que diera a conocer qué datos se han barajado para determinar la incidencia acumulada a 14 días en Benavente la semana pasada, en la que dijo que “los datos son los datos”, el alcalde señala ahora que “efectivamente, los datos son los que son y hay que hacer una rendición de cuentas. Si tan convencidos están de los datos, que los aclaren. Es una exigencia ya del sector”, aseguró el primer edil.

Y añadía “yo no creo en las coincidencias y las casualidades y menos a la vista de los datos. Es absolutamente imposible que durante tres días seguidos Benavente haya tenido una incidencia de 196,77 casos, cuando los datos de casos positivos y PCR se han estado moviendo”. Insistió que “si me he equivocado no tengo ningún problema en reconocer mi error, pero que alguien nos explique cómo es posible que se mantenga esa incidencia inamovible durante tres días seguidos. Algo no se ha hecho bien”.

Dadas las cifras, el sector hostelero asume las medidas “con resignación”, “nada de lo que digamos hará cambiar de postura a la administración”, “es algo que tienen decidido, quince días, y son quince días”, comentaban ayer algunos hosteleros. Lamentan también las cancelaciones a las que han tenido que hacer frente durante dos fines de semana “importantes” con comuniones. “Al estar en el nivel 4, es que ni teniendo espacio al aire libre podemos acoger celebraciones. Las medidas son muy restrictivas. Pero sí se pueden celebrar en pueblos de aquí al lado”, añadían.

En este sentido, Huerga señalaba que “lo que es absolutamente ridículo es que Benavente como población superior a 5.000 habitantes está regido por esas tasas de incidencia. Sin embargo, en municipios de alrededor, en algunos de ellos durante la semana pasada y esta con brotes declarados y con tasas de incidencia acumulada que cuatriplicaban a Benavente han podido tener sus establecimientos abiertos y, mientras tanto, los hosteleros de la ciudad viendo cómo la gente se marcha a los municipios de alrededor que están en peores circunstancias, con peores datos sanitarios”.

En la jornada de ayer la positividad en las pruebas PCR se situaba en 5,23% y la trazabilidad se situaba en el 60%.