El Ayuntamiento de Benavente, la Subdelegación del Gobierno y una representación de los propietarios de los negocios afectados se comprometieron ayer a colaborar para el desarrollo de la reordenación integral de la carretera N-525 que sirve de entrada a la ciudad desde la salida 259 de la autopista A-66, así como de la zona de viales que dan acceso a los establecimientos situados a ambos márgenes de la vía. Dado que la tramitación se prevé larga, como medida de urgencia está prevista una reparación provisional de los baches a lo largo de los próximos meses.

Desde hace más de dos décadas, este tramo de la carretera N-525 ha sufrido un progresivo deterioro que ha provocado numerosos socavones en el firme y los viales de acceso, además de deficiencias en la señalización horizontal y vertical y la iluminación. Ayer, representantes de la Subdelegación del Gobierno y la Unidad de Carreteras, del Ayuntamiento y de los propietarios de establecimientos afectados se reunieron para solucionar una situación que, admitieron, es “vergonzosa”.

Por un lado, los responsables de la Administración central y local se comprometieron a llevar a cabo una reordenación integral de la zona. Carreteras del Estado, dependiente del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, asumirá la regularización y rehabilitación de la carretera desde el eje central hasta 15 metros a ambos lados de la vía, que es del espacio del que es titular. El Ayuntamiento coordinará la reorganización del resto del espacio desde esos 15 metros hasta la zona donde se encuentran los numerosos establecimientos que hay en la zona. Entre otros muchos, la Inspección Técnica de Vehículos a empresas de paquetería, talleres o establecimientos de hostelería.

Ayer acudieron a la reunión propietarios de tres de ellos en representación de los negocios afectados. Posteriormente, el alcalde, Luciano Huerga, agradeció su intención de colaborar económicamente con la reparación de la zona que no es de titularidad estatal.

De momento, y dado que la tramitación para la regularización y reordenación de la Nacional 525 y todo el entorno será larga y puede demorarse durante meses, como medida de urgencia en las próximas semanas está previsto realizar una reparación provisional de los baches, algunos con unas dimensiones de varios metros de anchura que les hacen parecer socavones e, incluso, auténticos cráteres.

Denuncias de propietarios

Tras las numerosas denuncias de los negocios situados a ambos márgenes de la N-525, la semana pasada el subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, convocó una reunión con todas las partes implicadas, que tuvo lugar ayer por la mañana. “No podíamos permanecer de lado ni de perfil ante esta situación. Teníamos que afrontar los problemas”, insistió. Y no es fácil ya que, primero, exige solucionar un problema “histórico”, como lo calificó el alcalde, Luciano Huerga, que ha venido generándose a lo largo de muchos años, y una “situación compleja” en lo referente, sobre todo, a la titularidad de la vía y los viales de servicio. La N-525 es titularidad del Estados, eso parece claro. Pero, según explicó el primer edil, el resto del espacio es propiedad de los establecimientos allí ubicados ya que nunca se hizo efectiva la cesión al Ayuntamiento.

Con este primer encuentro se sentaron las bases para dirimir este asunto de la titularidad y, a partir de su resolución, acometer la rehabilitación. Con este objetivo trabajaran en la tramitación previa tanto los técnicos de la Unidad de Carreteras como los municipales .

Todas las partes manifestaron su máxima colaboración que, de hecho, se plasmará en un convenio, en la puesta en marcha de una comisión integrada por las tres implicadas y en los proyectos que sean necesarios.