Los problemas de contaminación por niveles de nitrato o arsénico en el agua potable de muchos pueblos de la provincia pueden ser pronto historia. La Diputación prepara la inminente contratación, ya con el visto bueno del Ministerio de Medio Ambiente, del proyecto que permitirá construir una red mancomunada de agua potable que conectará con la de Benavente, y que llevará el servicio a localidades de Tierra de Campos y Pan.

Hasta el momento la institución provincial cuenta con el interés de cerca de 40 municipios, entre ellos Villalpando, Villafáfila, Manganeses, Granja de Moreruela, Villanueva del Campo, o Torres del Carrizal, entre otros. Pero tampoco se descarta que de esta red se buena beneficiar hasta Monfarracinos, siempre y cuando suscite interés en pueblos de su entorno. Lo mismo sucede que otros ayuntamientos que se incorporen a este proyecto y quieran aprovechar sus prestaciones, tal y como precisan desde el área de Medio Ambiente de la institución provincial que dirige Javier Faúndez.

Las principales ventajas de esta red mancomunada, con una inversión inicial de 200.000 euros para redactar el proyecto, es lograr un suministro de agua estable tanto en cantidad como en calidad. Además de evitar las restricciones o cortes que aún se producen en los meses de verano o cuando (antes de la pandemia) los pueblos multiplicaban sus habitantes durante la época estival, el servicio terminará con los indicadores de contaminación que aún se siguen contabilizando en diferentes términos municipales. Tantos los nitratos como el arsénico, pese a tratarse de indicadores mínimos, obligan la mayor parte de las ocasiones a interrumpir el suministro de agua potable hasta que se solucione el problema o, bien, hasta que se construya una pequeña depuradora en la localidad o se reforme la existente.

Las plantas de depuración individuales tienen la contrapartida del elevado coste del mantenimiento y que, en definitiva, son “parches” a un problema común de buena parte de la provincia. La red mancomunada de agua unida a la de Benavente aparece ahora como una solución que puede ser definitiva.

Uno de los objetivos es que el precio sea competitivo para los hogares

Una vez redactado el proyecto, cuando ya se conocerá además el coste total de la infraestructura, se abrirá un periodo de alegaciones y habrá que tener muy en cuenta el impacto que pueda existir en el entorno a las Lagunas de Villafáfila. Para la fase de las obras, donde irá a parar el grueso de la inversión, la institución provincial plantea dedicar un montante a fondo perdido de sus presupuestos, aunque como ocurre con otros servicios lo habitual es que los ayuntamientos también colaboren con un porcentaje, y que incluso puedan llegar ayudas europeas, máxime ahora cuando la UE prima los proyectos vinculados a la mejora medioambiental. Desde el área de Medio Ambiente de la Diputación Provincial se afirma que el coste para el ciudadano será similar al que pueden pagar los beneficiarios de la ETAP (Estación de Tratamiento de Agua Potable) de Benavente, es decir, “precios muy competitivos”. Otro factor a tener en cuenta es el número de localidades que finalmente se sumen a esta iniciativa, ya con 40 pueblos que han mostrado su interés, aunque la cifra final podría superar fácilmente el medio centenar. La red mancomunada de agua potable para la zona de Campos-Pan que pone ya en marcha la Diputación con el primer paso, que es redactar el proyecto, y que conectará con la red que existe en Benavente y Los Valles, convertirá a la infraestructura en una de las más importantes de la provincia, al menos en cuanto a abastecimiento se refiere.

Las nuevas potabilizadoras individuales podrían pasar a la historia

Las potabilizadoras que funcionan en la provincia garantizan el correcto suministro de agua potable a los habitantes de sus pueblos. Pese a ello, y al tener que asumir costes de mantenimiento y reparaciones, es probable que muchos municipios con problemas en el servicio de abastecimiento opten por unirse a la red mancomunada que la Diputación construirá para pueblos ubicados sobre todo al este de la N-630, es decir Tierra de Campos y Pan. En la imagen, dos personas observan las obras de la nueva potabilizadora de Villalpando eun una imagen de archivo.