Rafael Palmero Ramos, obispo emérito de Orihuela-Alicante y natural de la localidad zamorana de Morales del Rey, falleció la madrugada del domingo al lunes a los 84 años como consecuencia de una enfermedad que padecía.

Según informan desde la Conferencia Episcopal Española, “hoy, a las 10.45 horas, el féretro con los restos mortales de Rafael Palmero llegará a la concatedral de San Nicolás de Alicante. Después de rezar un responso, se instalará la capilla ardiente en la Capilla de la Comunión, donde los fieles podrán visitarlo hasta las ocho y media de la tarde”. Además, aseguran que “mañana a las 11.00 horas se celebrará en San Nicolás la misa córpore insepulto. El próximo sábado, 13 de marzo, a las 10.00 horas, se celebrará en la catedral de Orihuela la eucaristía por el eterno descanso de Rafael Palmero”.

Rafael Palmero nació en Morales del Rey, provincia de Zamora y diócesis de Astorga, el 27 de julio de 1936. Cursó los estudios de humanidades y filosóficos y los dos primeros años de teología en el seminario conciliar de Astorga. Después, en Roma, amplió su formación teológica. Allí obtuvo la licenciatura y el doctorado en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana y la licenciatura en Ciencias Sociales por la Pontificia Universidad Santo Tomas de Aquino “Angelicum”. Fue ordenado sacerdote el 13 de septiembre de 1959 en Astorga y en el 1972 se incardinó en la archidiócesis de Toledo.

El 24 de noviembre de 1987 fue nombrado obispo auxiliar de Toledo y obispo titular de Pedena. Recibió la ordenación episcopal el 24 de enero de 1988. El 9 de enero de 1996 fue trasladado a la sede episcopal de Palencia. El 26 de noviembre de 2005 fue nombrado obispo de Orihuela-Alicante, tomando posesión de la sede el 21 de enero de 2006. El 27 de julio de 2012, el Papa Benedicto XVI aceptó la renuncia al gobierno pastoral de esta diócesis, en conformidad con el canon 401, párrafo 1, del Código de Derecho Canónico. El zamorano dejó la diócesis el 29 de septiembre de 2012.