El escritor José María Lebrero reside en Benavente y cuenta con múltiples libros de relatos publicados y varias novelas bajo su nombre. La última, “Los guardianes invisibles”, publicada el pasado año, que le hizo al zamorano alzarse con el Premio Internacional de Novela de Literatura Infantil y Juvenil con la editorial Edebé en México.

–Usted ha publicado varias novelas y numerosos libros de relatos. ¿De dónde le viene esta pasión por la escritura?

–La pasión por la escritura me viene de la lectura. Siempre me ha gustado mucho leer y, yo creo, que ante todo, antes de ser escritor, hay que ser un buen lector. Con buen lector me refiero a leer habitualmente y disfrutar leyendo. De ahí me viene, desde que era muy pequeño siempre he estado leyendo y esa pasión por la lectura hizo que comenzara en este mundo de la escritura.

–Una de estas novelas, “Los guardianes invisibles”, publicada el pasado 2020, le hizo conseguir el Premio Internacional de Novela de Literatura Infantil y Juvenil con la editorial Edebé en México. ¿Qué sintió al recibir este galardón?

–La verdad que muchísima alegría porque, si te soy sincero, me presenté al concurso y me olvidé de que me había presentado (ríe). Me olvidé tanto que el primer correo que me enviaron ni lo vi, pero ya la segunda vez que se pusieron en contacto conmigo, me sentí muy contento al conocer la noticia y que había sido el elegido para ese galardón. Fue un concurso al que se presentaron más de 200 escritores de alrededor de 14 países, y que unos entendidos literarios te otorguen a ti ese galardón pues es una gran satisfacción, no cabe duda. Además, se trata de un plan de lectura que tiene el Gobierno de México para acercar los libros y la propia lectura a las escuelas del país. Y, hombre, que un libro tuyo llegue a todas esas escuelas y permita a los más pequeños disfrutar con la lectura, pues más orgullo aún si cabe. Ya te digo, muy contento con la gran aceptación que ha tenido la novela y más aún al no esperármelo, al no tener constancia de ese concurso y venirme un poco como de sorpresa la propia noticia.

–¿Dónde se siente más cómodo, al escribir relatos o novelas?

–Yo empecé escribiendo relatos y era lo que más me gustaba, pero con el paso de tiempo diría que me estoy aficionando más a las novelas. En los últimos años, he escrito varias y la balanza yo creo que se está inclinando más hacia ellas. Aún así, me siento también muy cómodo con los relatos, pero si tuviera que decantarme por uno, en cuanto a comodidad, diría que las novelas, sí.

–¿Cómo describiría su rutina de escritura?

–Yo siempre procuro escribir todos o la mayoría de los días, siempre que mi trabajo me lo permita. Aunque no tengo un horario fijo, a veces escribo por la mañana, otras por la tarde, otras por la noche… No tengo horario, pero sí que creo que es adecuado escribir un poco todos los días. Bueno, un poco o lo que creas conveniente y tu tiempo te lo permita, claro. Yo procuro escribir todos los días para que tenga una continuidad porque he notado que, en algunas circunstancias, si estoy escribiendo una novela, por ejemplo, y dejo que pase un poco el tiempo, después me cuesta mucho reengancharme y seguir el hilo de lo que estaba escribiendo. Por ello, mi rutina de escritura procuro que sea habitual y constante.

–Y en esos días en los que las palabras no salen, ¿qué suele hacer?

–Pues tengo la gran suerte de que, hasta ahora, no se ha dado esa situación nunca. El sentarme y no saber lo qué escribir o quedarme bloqueado la verdad que es una cosa que nunca me ha pasado y, bueno, esperemos que así siga (ríe). Ese temor, ese miedo al folio en blanco que muchos otros escritores sí que lo han vivido o lo tienen, yo, de momento, ya te digo que no lo he vivido nunca porque siempre tenía en mente y en mi cabeza lo que iba a escribir. En el transcurso de la escritura de una obra, igual puedo dudar en algo, eso sí que es cierto, pero siempre consigo que salgan las palabras. Por ejemplo, en las novelas sí que dudas, pero luego los personajes fluyen, te dejas llevar y sigues escribiendo y siguiendo con el transcurso de la obra.

–¿Cómo se sintió la primera vez que vio una obra suya publicada?

–Pues la primera vez que vi una obra mía publicada sentí una enorme satisfacción, pero tengo que reconocer que también fue una situación extraña. Está claro que es muy gratificante ver una obra tuya publicada, pero es algo, para mí personalmente, un poco raro. Incluso ahora, que ya llevo unos cuantos libros publicados, también lo sigo sintiendo así. Es extraño porque vas andando y ves en una librería o en un escaparate un libro tuyo, una obra tuya con tu nombre. No sé, es algo muy extraño pero obviamente muy bonito porque ya es difícil escribir una obra, pues lo es más que esa obra salga publicada. Por lo tanto, yo sigo viviendo esa situación extraña, pero me siento muy orgulloso porque es como que reconocen el trabajo que has hecho durante un largo tiempo y todo el esfuerzo que le has dedicado a ello. Y es que la verdad que yo no tengo ningún tipo de quejas en cuanto al gran recibimiento que han tenido mis obras y solo puedo tener palabras de agradecimiento.

–¿Tiene algún proyecto en mente de cara a un futuro?

–Pues la verdad es que sí. Hay tres libros que siguen un poco en el aire, la verdad que no sé si los voy a publicar en este año o el siguiente. El primero es la tercera edición de “Culos”, que tuvo bastante éxito en las dos anteriores. En esta nueva, tengo nuevos relatos divertidos para leer con el sentido del humor. Aunque se trata de la tercera edición, es un libro con relatos muy nuevos que yo creo que va a gustar mucho. La segunda es una obra con la que gané el pasado año el Premio Nacional de Novela de Narrativa, pero aún no la he desvelado, porque no sé cuándo saldrá publicada. Tenía pensado hacerlo el año pasado pero el COVID me echó para atrás. Y otro de los proyectos que tengo en mente es publicar en España la novela de “Los guardianes invisibles”, ya que solo está publicada en México. Ya te digo, son proyectos que tenía pensado sacarlos, pero que la verdad que no sé la fecha en la que saldrán publicados porque con esto de la pandemia estamos todos un poco a la espera de la situación y ver cómo avanzan los acontecimientos.