El Ayuntamiento de Benavente vuelve a solicitar a la Consejería de Sanidad y a las autoridades competentes en materia sanitaria que actúen y tomen las medidas necesarias "que eviten un desenlace que puede ser devastador para la ciudad y comarca de Benavente". Medidas entre las que se encuentra la realización de cribados masivos poblacionales que sí se están realizando en otros puntos de la provincia, y así, evitar superar el umbral de la incidencia acumulada de 1.500 casos por 100.000 habitantes que obliguen a tomar medidas aún más restrictivas como un cierre adelantado de los comercios y hostelería de la ciudad, según explica el alcalde de Benavente, Luciano Huerga. "Situación que puede ser fatal para los negocios de la ciudad como ya está sucediendo en 53 municipios de nuestra región".

Ya manifestó ayer su malestar el alcalde con la negativa a la realización del cribado en Benavente. Hoy vuelve a solicitar esa iniciativa para frenar los contagios en la zona y se pregunta "¿Hasta qué nivel de incidencia esperarán las autoridades competentes para tomar decisiones? ¿Hasta qué número de casos y muertes esperarán las autoridades competentes para reaccionar?".

Atendiendo a los datos, desde que el Ayuntamiento de Benavente solicitase a la Consejería de Sanidad y a la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora la realización de un cribado para detectar los casos positivos asintomáticos entre la población el pasado lunes 25 de enero, la curva de incidencia acumulada de casos a 14 días no ha dejado de subir. El 25 de enero los datos relativos a Benavente reflejaban 989 casos por 100.000 habitantes. Una semana después, ese dato se sitúa en 1.113 casos por 100.000 habitantes y "las previsiones no son nada alentadoras".