Los afectados por el síndrome de fatiga crónica y fibromialgia en Zamora superan el centenar de personas. Afibe, la asociación situada en Benavente lleva a cabo labores de apoyo psicológico y físico para que los afectados puedan paliar los síntomas de esta enfermedad incapacitante. Ruth Colinas, trabajadora social de Afibe, indica que la asociación tiene programadas muchas actividades y novedades para prestar el mejor servicio a las personas afectadas.

Como novedad, se suma al equipo de profesionales una nutricionista para ayudar a llevar mejor la enfermedad.

La atención que reciben es personalizada en esta área porque “a veces toman demasiada medicación y están faltos de nutrientes o no hacen las dietas más adecuadas”, señala la trabajadora social. Para ayudarles, este año han organizado una serie de talleres online en los que podrá participar cualquier persona interesada. Un total de 6, que se irá distribuyendo según la demanda. Tienen previsto que empiecen a finales de febrero. Entre ellos destacan “Alimentación y dolor. Qué es una dieta antinflamatoria y cómo aplicarla en nuestro menú”; “Alimentación emocional. Por qué nos gusta comer y qué papel tiene en las emociones”; “Obesidad y sobre peso. Cómo bajar de peso de forma saludable y para mejorar los síntomas de la fibromialgia y fatiga crónica”; o “Etiquetado de alimentos ¿En qué debemos fijarnos para comprar los productos más saludables”.

La sede de la asociación zamorana se encuentra en Benavente y da cobertura a enfermos de toda la provincia. La llegada del nuevo año les ha hecho plantearse nuevos proyectos, pero estos se han visto truncados por la entrada en vigor de nuevas medidas restrictivas y de aforo que afectan al funcionamiento de la asociación, pero sobre todo a la recuperación y mejora de las personas que acuden a ello.

El nuevo año llegaba lleno de esperanza después de un 2020 que se ha hecho muy cuesta arriba para los enfermos que acuden cada día a la asociación. “Hubo que suspender todas las actividades”, indica Ruth Colinas que insiste en la importancia de la terapia y el movimiento para este tipo de pacientes.

La asociación tenía planeadas multitud de actividades para el pasado año y tienen la intención de retomarlas este, “si las condiciones lo permiten”. Con ello buscan que los asociados puedan recuperar cuanto antes todo lo que han perdido a nivel físico y psicológico durante este confinamiento. “Les ha afectado mucho física y psicológicamente y ahora que habíamos empezado y estaban muy motivados y el hecho de tener que volver a suspender las actividades para ellos es un palo. Porque a nivel físico todo lo que habían recuperado con Pilates y la fisio, la mayoría lo han perdido, porque han sido muchos meses de confinamiento, de no poder hacer nada y de no tener un profesional que te evalúe, te valore y te vaya guiando y a nivel psicológico lo mismo. Continuamos con las terapias individuales, pero es que las grupales también son muy importantes.”

Colinas asegura que “con estas medidas se han dejado a muchos colectivos olvidados. Es importante que sigan porque nosotros cumplimos con todas las medidas de seguridad, pero en vista a la nueva normativa nos hemos visto obligados a cerrar” indica la trabajadora social. Precisamente en su afán de seguir manteniendo la normalidad desde la asociación se siguen ofreciendo servicios individualizados como son el de psicología o fisioterapia que se realiza en una clínica especializada.

En la sede, en calle Lagares, se encuentra Ruth Colinas, la trabajadora social que se encarga de ofrecer información y asesoramiento a los pacientes además de coordinar la asociación. Cualquier afectado puede acercarse para obtener la información que necesite.

En este punto resalta “la importancia de que la gente se asocie. Nosotros prestamos servicios, pero a través de la asociación también hacemos fuerza para que las administraciones nos hagan caso y cambien muchas cosas a nivel económico, social y laboral. Independientemente de cuán lejos estén de la asociación que se asocien porque defendemos los derechos de todas las personas.”

Otro de los puntos esenciales para los pacientes afectados con fibromialgia o síndrome de fatiga crónica es el bienestar psicológico. “Trabajan la afectación de la enfermedad, positividad y los problemas que puedan surgirles a ellos de manera psicológica. Lo hacíamos una vez a la semana, terapia psicológica grupal, pero ahora lo tenemos paralizado. La psicóloga también da estimulación cognitiva, porque tiene bastante afectación para los pacientes. Trabaja con ellos la memoria para que sigan desarrollando sus capacidades y que no las vean mermadas. Estos talleres se daban de manera presencial, pero ahora los vamos a hacer online a través de las distintas plataformas que tenemos disponibles” indica Colinas.

Recuerda que cuentan con un servicio de asesoramiento jurídico especializado para los socios, que ha conseguido el reconocimiento de la incapacidad por esta enfermedad de una mujer de la comarca.