Los vehículos híbridos dejarán de disfrutar de la bonificación del 25% de la cuota tributaria del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) hasta ahora ilimitada.
El Pleno del Ayuntamiento de Benavente aprobará este viernes la modificación de la ordenanza fiscal que limita esta bonificación a un periodo máximo de cuatro años durante los cuales la reducción de la cuota se irá minorando cada ejercicio económico y deberá cumplir unos parámetros específicos de contaminación.
El artículo de la ordenanza modificado pasa a establecer que gozarán de bonificación los vehículos automóviles en la clase de turismo o asimilados cuyas emisiones oficiales de dióxido de carbono (CO2) no superen la tasa de 95 g/km.
Las emisiones oficiales de CO2 tendrán que acreditarse con el certificado expedido por el fabricante o importador del vehículo, excepto en aquellos casos en que dichas emisiones consten en la tarjeta de inspección técnica o se obtengan a través de los ficheros o datos informáticos que la Dirección General de Tráfico (DGT) pone a disposición de los ayuntamientos.
Desde octubre de 2015 los coches híbridos (motores eléctrico-gasolina, eléctrico-diésel y eléctrico-gas) gozaban de una bonificación de la cuota del impuesto del 25% sin límite de tiempo. A partir de ahora tendrán una vigencia de cuatro años naturales desde su primera matriculación y los porcentajes de bonificación a aplicar serán: 25% durante el primer año; 15 % durante el segundo año; 10% durante el tercero; y 5% durante el cuarto año.
Del mismo modo, la Concejalía de Hacienda acometerá la modificación de la ordenanza fiscal que regula la ORA para eliminar la exención del pago del precio público por estacionar en Zona Azul. Hacienda prevé someterla a la aprobación del Pleno a finales de noviembre.
Los vehículos eléctricos seguirán gozando sin embargo de una bonificación del IVTM del 75%, el máximo que permite la ley, y también estarán exentos del pago por estacionar en Zona Azul.
Estos cambios se inspiran en los objetivos de la Transición Ecológica y en la “descarbonización” del modelo energético para alcanzar el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero marcado por la Unión Europea en 2050.
La generalización de la producción de vehículos híbridos, dentro de la oferta comercial de todas las marcas, ha contribuido a esta modificación, según recoge la memoria que acompaña a la modificación de la ordenanza, además de los informes sobre fraude del Servicio de Intervención.
La ordenanza fiscal del Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica también se modifica para simplificarla con el fin de que los usuarios no tengan que aportar a los servicios municipales documentos y datos que ya obren en poder del Ayuntamiento o de otras administraciones públicas y, singularmente, que consten en la base de datos de consulta de la DGT sobre los vehículos, así como en la información mensual de datos que se remite a los ayuntamientos.
