Los vecinos de Manganeses de la Polvorosa extreman la precaución ante la confirmación de cuatro nuevos casos de coronavirus en el pueblo, en la misma unidad familiar. El origen del brote es un caso importado de Zaragoza, según explicó hoy la consejera de Sanidad de la Junta, Verónica Casado. Los rastreadores buscan ahora los contactos que han tenido este grupo de personas en el pueblo, de 633 habitantes.
En la tarde de ayer el alcalde de la localidad, Antonio lanzaba un mensaje de “tranquilidad” y pedía “precaución” a los vecinos porque “lo importante es que se resuelvan los tres casos que hay confirmados y no vayan a más. Parece que está controlado, se trata de un núcleo pequeño y podría estar resuelto en unos días”, señaló.
La Junta de Castilla y León desde el pasado sábado actualiza diariamente la información de zonas básicas de salud. Los datos ofrecidos señalan en el Centro de Salud Benavente Norte, al que pertenecen los vecinos de Manganeses de la Polvorosa, un total de 4 PCR positivos en los últimos 7 días.
El Ayuntamiento de la localidad, siguiendo las prescripciones de las autoridades sanitarias ordena una serie de medidas de seguridad preventivas y de obligado cumplimiento entre las que contempla la prohibición de las reuniones de grupos de 10 o más personas, tanto en espacios abiertos como en establecimientos públicos o privados. También recuerda la obligación legal del uso de la mascarilla y la recomendación de respetar la distancia de seguridad de dos metros en todo momento.
Por otro lado, explica el alcalde que se ha solicitado por parte de la Subdelegación de Gobierno en Zamora la colaboración y vigilancia de la Guardia Civil, que reforzará su presencia en este municipio. “Sí nos han ofrecido ayuda la Guardia Civil pero no con un fin sancionador, sino prevenir posibles contagios que es lo importante. La gente parece que con la presencia de la Guardia Civil toma más conciencia de la situación que estamos viviendo”, explicó el primer munícipe.
También pide el alcalde a todos los vecinos “que se limiten al máximo los contactos físicos para evitar en lo posible la transmisión comunitaria de este brote”, tal y como recoge el bando municipal.
“Hasta ahora no habíamos tenido casos positivos y el comportamiento de los vecinos, en general, está siendo ejemplar. Me atrevería a decir que la mitad de la población de más de 50 años está autoconfinado en casa, por distintos motivos, por miedo, por precaución, por lo que sea, pero no se ve mucha actividad en el pueblo. Nada que ver con otros veranos”, indicó Ferrero. “La gente no está yendo a los bares ni a comercios ni nada por el estilo”, añadió.
Reconoce el regidor, no obstante, un “repunte de población, lo que es normal, porque la gente vuelve a su casa, como todos los años por estas fechas. En el pueblo se sienten más libres que en la ciudad pero tenemos que pedir que se mantengan las medidas de seguridad que nos exige Sanidad”.
El alcalde hace hincapié en lo que denomina la “tranquilidad activa”.
