La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Benavente, Carolina Félix, ha dictado orden de alejamiento de los cuatro miembros de la familia implicada en el apuñalamiento de dos hermanos el jueves de la semana pasada.

La familia, acompañada de su abogado, se entregó el pasado lunes a la Guardia Civil, que les imputó la presunta autoría de dos delitos de homicidio en grado de tentativa. La juez tomó declaración a los cuatro y también a uno de los dos hermanos, que aseguró que durante la reyerta había participado de forma activa un menor de edad cuya presencia no ha sido confirmada y cuya identidad se desconoce.

Este hecho, llevó a la juez a mantener una conversación telefónica con la fiscal de guardia a la que no requirió comparecer por videoconferencia al optar por poner en libertad a los cuatro detenidos. Sí decretó la medida cautelar de que la familia no acercarse a las víctimas (los dos hermanos) y de comparecer en sede judicial cada quince días.

La instrucción sigue adelante pendiente de la declaración del segundo hermano, cuyo testimonio, cuando se produzca, se incorporará a la instrucción y podría arrojar luz sobre la presencia activa de un menor. De las dos víctimas de las dos reyertas ocurridas en la confluencia de la calle los Carros con calle Fortaleza se colige que un ajuste de cuentas por drogas fue el desencadenante. El primero de los hermanos recibió heridas de arma blanca (varios cortes) en una extremidad. Fue atendido en el Hospital de Benavente y trasladado a Zamora. El segundo hermano recibió presuntamente varios golpes en la cabeza con una macheta de cocina que la Guardia Civil encontró en la calle junto a varios rastros de sangre.