El Centro de Estudios Benaventanos Ledo del Pozo hizo entrega a Benavente de un cuadro del Castillo de datado de principios del siglo XIX.
La entrega se llevó a cabo en un acto celebrado en la mañana de ayer en La Mota. En el evento estuvieron presentes el alcalde de Benavente, Luciano Huerga, el Diputado de Cultura, Jesús María Saavedra, y el presidente del CEB Ledo del Pozo, Fernando Regueras Grande.
Según el alcalde de la localidad, la llegada del cuadro a Benavente es “la recuperación de un hijo pródigo, de un elemento que forma parte del bagaje patrimonial y cultural de la ciudad”.
Huerga dedicó unas palabras de agradecimiento al Centro de Estudios Benaventanos por “su implicación en este tipo de labores de investigación, documentación y recuperación” y, en concreto, por “su labor ardua y callada para conseguir este cuadro, al que llevaban siguiendo desde 2003”.
Destacó, además, la importancia de un hecho como este porque “a pesar de ser la sociedad con mayor nivel de información conocida hasta la fecha, todavía conocemos muy poco de nuestros orígenes”. Apuntó que “es importante conocer el pasado para conocer lo que somos hoy en día y lo que se hizo en el pasado, tanto lo bueno como lo malo”.
Terminó su ponencia Luciano Huerga aludiendo directamente al presidente de Ledo del Pozo, al que invitaba a llegar a un acuerdo para “colocar el cuadro en un lugar que se merezca, acorde con la importancia que tiene”.
El Diputado de Cultura y Promoción del Territorio de Zamora, Jesús María Saavedra, consideró el acto como “un día histórico” porque “dentro de 20 o 30 años, los niños que hoy corretean por aquí, vean el cuadro se acordarán de lo que hemos vivido hoy”, en el que el Centro de Estudios Benaventanos otorga a la ciudad de Benavente un “cuadro espectacular”.
Añadió, no obstante, que el cuadro “inundaría de un profundo dolor a los benaventanos, por ver la maravilla que era el castillo y haberlo perdido por los devenires de la historia”.
Saavedra recordó el acto celebrado la semana pasada en Santa Marta de Tera y se enorgulleció por “una relación cada día más estrecha” que Ledo del Pozo tiene con la Diputación de Zamora. Apuntó, además, que actos como este sirven “para llevar la cultura a los municipios”.
Respecto a la futura ubicación del cuadro, Jesús María Saavedra declaró que “el lugar no es importante; lo importante es que va a estar en Benavente, y que va a estar para siempre”.
Cuando llegó el turno a Fernando Regueras, decidió narrar la historia del cuadro presentado y el recorrido que siguió hasta llegar a Benavente.
Según el presidente de Ledo del Pozo, el cuadro apareció por primera vez en 1915 en una revista de la Restauración. “Se decía que procedía de un lienzo y que se salvó milagrosamente de la quema del castillo”, apuntó.
En julio de 2003, apareció en una subasta en Madrid. Inicialmente había quedado desierto, pero fue comprado y llevado a Marbella.
De allí pasó a Múnich, donde fue descubierto por Carolina Huerga, que además hizo de intérprete en la subasta, celebrada el pasado 2 de abril.
Añadió finalmente que la voluntad de Ledo del Pozo es pixelar el cuadro y otorgar a cada pixel un valor económico. Cada ciudadano podrá hacer sus aportaciones hasta que se recupere todo el dinero invertido para la adquisición del cuadro.
El dinero recaudado irá destinado a los servicios sociales de Benavente y a las familias más vulnerables y afectadas por la pandemia.
Independientemente de la cantidad aportada por cada ciudadano, el nombre de todo aquel o aquella que haya colaborado figurará en un folleto conmemorativo.
