La situación del confinamiento ha llevado a más de medio centenar de familias en la ciudad a necesitar ayuda para acceder a los alimentos, al no disponer de ingreso alguno y vivir al día. Si bien la atención ordinaria a las necesidades de alimentos se canaliza a través del convenio de colaboración firmado por la Junta de Castilla y León y Cruz Roja por importe de 1,2 millones de euros, el Ayuntamiento de Benavente, a través de la Concejalía de Bienestar Social ha implementado diferentes medidas complementarias a la vía ordinaria (CEAS-Cruz Roja, O12 - Cruz Roja, Cáritas) para atender necesidades alimentarias insuficientemente cubiertas, según explica el concejal, Antonio Vega.

De modo que se ha reactivado el convenio de colaboración con la Fundación Alimerka para canalizar los excedentes de diferentes productos como pan, bollería, lácteos o embutidos, de los supermercados de El Ferial y Cañada de la Vizana al Centro Cívico y los del supermercado de San Antón al Centro de Día la Veguilla, para su distribución entre las familias más necesitadas. También se ha firmado un convenio similar con el supermercado Froid.

"Se trata de proporcionar alimentos de consumo diario como el pan o los lácteos. Hemos recuperado este convenio ante la situación provocada por la pandemia", explicó el concejal.

Fruto de la situación creada por la crisis de la pandemia, desde Fundación Alimerka también se han donado vales de comida por valor de 200 euros para atención de casos en situaciones especialmente complejas.

Mientras que la Fundación La Caixa ha habilitado un fondo social de 5.000 euros para la cobertura de alimentos dirigidos especialmente a la población infantil (0-3 años).

También la Concejalía ha mantenido con distintas empresas de la localidad que ha permitido la donación de alimentos: leche GAZA, S.L. (528 litros de leche); INNOVA CHEF, S.L.. 150 kilos de ensaladilla; La Tahona de Alejos, 60 panes; Moralejo Selección 229,5 kilos de hamburguesas de cordero; Azucarera española, 500 kg de azúcar; compromiso de Embutidos Palazuelo de donación de varias cajas de chorizos; Bar Maral de 7.000 kilos de patatas.

"La intención es seguir consiguiendo la colaboración de empresas para que no haya ninguna familia que no tenga cubiertas las necesidades básicas", explicó Vega, quien hizo hincapié en que "lo que hacemos es complementar otras ayudas que dan las instituciones de alimentos. Nos hemos puesto en contacto con varios colectivos y esperamos que estén cubiertas todas las necesidades. Es gente que vive al día y al estar parado se ha quedado sin recursos suficientes para poder alimentar a la familia", señaló el edil.