La caja de donativos para personas necesitadas coronada con una vitrina y San Antonio de Padua ha sido más veces objeto de interés para los amigos de lo ajeno, pero en las últimas 48 horas ha sufrido dos embates de los que la caja ha salido indemne gracias a la Policía Local de Benavente, cuyo cuartel se encuentra a poca distancia del santo.

El viernes una persona indigente fue sorprendida manipulando la vitrina y la caja de las monedas con un alambre unos minutos antes de la media noche. Fue identificado y propuesto para una sanción.

El sábado, cinco minutos antes de las 23.30 horas de la noche, una llamada telefónica alertó a la policía de que una pareja estaba intentando manipular la vitrina y la caja de San Antonio. Los agentes identificaron a un hombre que alegó que estaba rezando al santo pues era muy de devoto del de Padua. Los agentes le pidieron que abandonara el lugar.