La residencia de mayores de Camarzana de Tera ha sido uno de los proyectos finalistas a los premios FAD de Arquitectura e Interiorismo de 2020. Proyecto del arquitecto de la zona Javier de Antón, el jurado del certamen ha tenido en cuenta varios aspectos de esta residencia passivhaus, pero singularmente su autonomía y muy bajo coste energético, a la hora de incluirla entre las obras finalistas.

El jurado que ha valorado las obras ha elegido 27 proyectos finalistas y 49 proyectos seleccionados en las diferentes categorías del total de 484 obras presentadas. En la categoría de Arquitectura el jurado ha destacado proyectos atentos al contexto, a la estrategia y al oficio, en diálogo con el espacio, el tiempo, la materia, el cuerpo y la naturaleza. Una arquitectura con un espíritu propositivo, generadora de sistemas más que de objetos.

En el caso de la residencia de Camarzana destaca el jurado su contexto: " A las afueras de un pueblo de Zamora, en la carretera, junto al bar. En el campo, campo". Se trata de la ampliación de una residencia para personas mayores de iniciativa privada, encargada a un arquitecto de la zona, que ya construyó la primera fase. "Con el foco puesto en el muy bajo consumo energético, se crea una arquitectura para el cuidado de las personas que genera espacios centrados en el confort y el bienestar físico de sus habitantes, en los que la luz natural, el soleamiento y la relación interior-exterior resultan esenciales. Se trata de un programa negligentemente invisibilizado en el debate arquitectónico convencional, donde sin embargo son urgentes las aportaciones desde la arquitectura", resalta el jurado. Los premios podrían fallarse en el mes de junio, si la COVID-19 no lo impide.