Los motivos son diferentes. Problemas de visión, dificultad para realizar una lectura fluida o de comprensión lectora, o el gusto por la lectura, por escuchar cómo otros leen diferentes textos. Son las diferentes motivaciones que los participantes en el taller de Rincón de la Lectura de Cruz Roja, en Benavente encuentran para acudir semanalmente.

Es una de las iniciativas del programa de promoción de la salud en que participan cerca de una veintena de personas. Todos ellos mayores de 65 años y que por distintos motivos disfrutan de la compañía del grupo. "Hay gente mayor que se siente sola porque a lo mejor ha reducido involuntariamente el contacto con las personas de su red social, o que tiene problemas para crear nuevas redes sociales o que son beneficiarios de cruz Roja y deciden participar en esta actividad", explicó la trabajadora social, Marian García.

Ramón Pérez García es el monitor encargado de coordinar la actividad. Él es colaborador de la junta local de Cruz Roja en Benavente y desde hace años que se inició esta aventura de leer en grupo han ido leyendo diferentes libros clásicos. Comenzaron con el Quijote y han disfrutado también de la lectura de "El Buscón', de Quevedo; "El Lazarillo de Tormes'; o "La Celestina y "El Conde Lucanor". Este año han optado por los relatos cortos como los que acoge la publicación "Cuentos para pensar", de Jorge Bucay con los que reflexionan y, además, pasan un rato "divertido" y "agradable", según explican.

El monitor comienza la lectura. Cada uno tiene su ejemplar y algunos siguen la lectura y otros solo escuchan. Después llega el momento de debatir sobre la lectura. Con esta actividad se fomenta la participación en actividades grupales, porque solo así se puede hacer grupo y tienen ese sentimiento de pertenencia. Y también se realiza la estimulación cognitiva y la fluidez verbal. "Hay personas que carecen de la habilidad de hablar en público y aquí poco a poco lo van haciendo. Todos ellos tienen habilidades para mantener una conversación fluida en grupo", añadió García.