Un vecino de Benavente pidió ayuda el viernes a la Policía tras ser agredido por miembros de una misma familia que le propinaron varios puñetazos. Le acusaban de haberles dado un golpe en el coche y le golpearon en el pecho y en el hombro. El hombre se refugió en un restaurante hasta que llegó la Policía, que comprobó que en el vehículo no se había producido daño alguno.