Fiesta y exaltación del pimiento, el producto por excelencia de la huerta de la zona del Tera, se dieron cita ayer en la localidad de Micereces. Cientos de personas, casi cuatrocientas, se animaron a participar en la celebración culinaria en la que fue protagonista el singular sabor del morrón de los Valles.
La celebración se hizo coincidir una vez más con los festejos en honor a la Virgen del Rosario, cuya programación festiva se inició el pasado viernes pero tuvo ayer su mayor peso. Estos festejos cuentan con la colaboración del bar Isabel y la Huerta del Tera.
Actos tradicionales como la procesión de la Virgen abrieron la jornada festiva. La comitiva procesional siguió el recorrido marcado por la música de los Dulzaineros del Valle. Les seguía la imagen mariana sobre unas andas con ruedas, llevadas por un grupo de mujeres del pueblo. Autoridades municipales acompañaron la procesión y también los vecinos de la localidad. Antes de entrar en el templo se cantó a Virgen mientras dos vecinos bajaron la venerada talla de las andas.
La celebración siguió después con una comida de fraternidad en la que se dieron cita cientos de vecinos y visitantes para degustar una exquisita paella, y una fritada de pimientos, con el morrón como protagonista. Las viandas se disfrutaron al aire libre, ya que el tiempo acompañó a la celebración.
El alcalde, Carlos Martín, destacó el buen ambiente de la jornada y la gran participación asistente a la comida, que estuvo amenizada con la música de la dulzaina Folkolid del Valle.
La animación continuó después con más música, a cargo del D'j local Samu Mi. C. Y los más pequeños pudieron disfrutar de los juegos hinchables instalados a modo de parque infantil para la ocasión. Por la noche, hubo más música o al menos así estaba previsto a cargo de una macrodiscoteca.
Hoy continúa la celebración festiva con una gran parrillada para el almuerzo y le seguirá el café amenizado con la música de Los Dulzaineros del Valle, para dar por finalizados los festejos.
