Cientos de personas se dieron cita ayer en el santuario de Navianos de Valverde para participar en una de las romerías más importantes de la región, la de la Virgen del Carmen. La lluvia no se lo hizo fácil a los romeros que se acercaron hasta el lugar sagrado para cumplir con una tradición en la que los devotos acuden desde diferentes puntos de la provincia zamorana y de otros puntos de provincias cercanas.

Desde primera hora de la mañana y partiendo de distintos pueblos llegan a Navianos cientos de personas en peregrinación, porque aunque algunos optan por acudir en turismos, lo cierto es que son muchos devotos los que hacen el recorrido a pie. Ayer también, a pesar de la intensa lluvia. Los más madrugadores acuden a la misa del peregrino en la ermita. Tras finalizar, los fieles devotos de la imagen mariana fueron haciendo una larga cola para besar el escapulario y ofrecer algún donativo. Otros optaron por encender velas que fueron colocando a las entradas de la ermita. Algunos acuden solo a esta misa, pero hay otros que prefieren quedarse en el lugar para acompañar a la Virgen en su procesión por el entorno de la ermita.

La intensa lluvia hizo que los tradicionales actos tuvieran que trastocarse. De modo que el coro ya fue entonando algunos cánticos en el interior de la ermita en lugar de hacerlo en la explanada donde se tenía previsto celebrar la misa. También se retiró el equipo de sonido.

Llegaron a la ermita los cofrades del Carmen, con sus trece varas. Esta cofradía este desde comienzos del siglo XVIII, según explican en el pueblo, y las varas se van turnando cada año. Son estos cofrades, los que llevan las varas, los encargados de sacar la imagen de la ermita para llevarla hacia el altar en el exterior. Aunque en esta ocasión, reinstalaron el altar en la ermita y los adornos florales para celebrar la misa concelebrada en el interior de la ermita ante la acuciante lluvia.

Acompañaron la celebración varios alcaldes de la zona de Valverde, además del de Navianos, estuvieron el de Friera, la de Burganes y Villaveza de Valverde. También acudió el diputado Juan Dúo.

La ermita estaba abarrotada y algunos fieles escucharon el acto litúrgico por los altavoces del exterior. Después salió el sol y la cofradía decidió sacar en procesión a la Virgen alrededor de la ermita y la acompañaron cientos de personas.

La fiesta continuó en la explanada con la degustación de pulpo, y otras viandas.