Una edición más el descenso de los "barcos locos" por el río Tera ha logrado una gran expectación. Desde las seis de la tarde las navegaciones participantes en esta actividad de Santa Croya fueron llegando a la zona de los Rederos, la mayoría de ellas llevadas sobre un tractor. Música, disfraces, animación no faltaron durante la espera de los improvisados navíos. Un par de naves espaciales, una mesa de dj's, una cárcel y hasta un circo se dieron cita en esta tarde en la que lo importante era pasarlo bien y disfrutar de una de las iniciativas que ha logrado consolidarse en el programa festivo de Santa Croya, a pesar del descenso de población. Durante días los participantes se han ido reuniendo para presentar las nuevas creaciones con el fin de no dejar perder una iniciativa que también ayer logró atraer a gente de los pueblos colindantes, movidos por la curiosidad de conocer el ingenio de los jóvenes de Santa Croya.

Las ganas no faltan, aunque algunos echan de menos algunos grupos de amigos que en otras ediciones se animaban a participar. Grupos de jóvenes volvieron a animarse a crear sus propias embarcaciones, sobre una base de porexpan y navegaron por un recorrido de algo más de un kilómetro hasta el puente. Allí fueron recibidos por decenas de personas que, en algunos casos, esperaron durante más y de una hora la llegada de los tardíos navegantes.

"El Circo", "La Cárcel" y "La Nasa" fueron los mejor valorados por el jurado y recibieron 300, 200 y 100 euros respectivamente. Y todos los participantes, hasta siete recibieron también 50 euros. Con esta cita lúdica se pone fin a varias jornadas festivas con gran participación.