El alcalde de Benavente, Luciano Huerga, remitió ayer una carta al presidente de la Diputación Provincial de Zamora, Francisco José Requejo, solicitándole una reunión "a la mayor brevedad posible" para poder abordar y buscar soluciones "a problemas históricos entre ambas instituciones".

Luciano Huerga transmite en la misiva su "felicitación personal y como alcalde de la ciudad de Benavente, por su reciente nombramiento como presidente de la Diputación Provincial, deseándole una fructífera y exitosa legislatura que favorezca el desarrollo y progreso que tanto necesita nuestra provincia".

A renglón seguido y de forma sucinta, Huerga entra en harina tras ofrecer su colaboración y predisposición personal "para abordar diversos temas y buscar soluciones a problemas históricos existentes entre ambas Instituciones, que redunden en beneficio de las mismas, pero especialmente de los benaventanos y zamoranos a los que debemos servir para aumentar mejorar su vida desde nuestros respectivos cargos y el ejercicio de nuestras competencias políticas", plantea.

Los problemas históricos a los que se refiere Huerga fueron un motivo constante de reivindicación durante el pasado mandato. Huerga reclamó, tras subrayar que Benavente con más de 18.000 habitantes es el municipio de mayor población bajo el paraguas de la Diputación de la Provincia y por ello el máximo contribuyente al reparto provincial de tributos del Estado que gestionar la institución provincial, un reparto más justo de los fondos provinciales.

El alcalde ha reclamado en numerosas ocasiones que los planes provinciales sean anuales, no bianuales y con cantidades nominativas cerradas que han venido dejando fuera a la ciudad en el resto de convocatorias provinciales. Por este motivo Huerga no ha cejado en denunciar que el trato de la Diputación a Benavente suponía un agravio comparativo hasta el punto de asegurar que para la institución valía menos un benaventano que cualquier otro ciudadano de la provincia.

El segundo caballo de batalla ha sido el parque de bomberos de Benavente, que pese a estar bajo el control y gestión del Consorcio Provincial, cuenta con una plantilla local. Huerga no ha dejado de denunciar el déficit que la prestación del servicio supone a Benavente, déficit que aumenta cada año al cumplir con el proceso de funcionarización paulatino de las plazas de bombero.