La primera parte del nuevo vallado de madera al estilo "Navarra" para canalizar la carrera del Toro Enmaromado entre la Rúa y la plaza de Santa María, fue instalado a primera hora de la mañana de ayer.

El vallado rodea una de las dos zonas ajardinadas de la plaza. La segunda "isleta" de vallado, que tendrá una prolongación más amplia de la prevista inicialmente en el proyecto, hasta la embocadura de la plaza de La Madera, se colocará entre el jueves y el viernes, según confirmaron ayer fuentes municipales.

La instalación del vallado de madera viene a coincidir prácticamente en el tiempo con la finalización de las obras en la plaza de Santa María, que estaban pendientes de pequeños detalles de urbanización.

Las obras continúan, ya en su recta final, en la segunda de fase de la calle Herreros, y es previsible que a partir del verano comiencen los trabajos en el último tramo, el que conecta la zona urbanizada actualmente con la plaza de Santa María.

Retirada de vegetación

La colocación del vallado en Santa María comportará en los próximos días una tarea adicional. Dado que las zonas que rodea están constituidas por mobiliario urbano y, sobre todo, por pequeños jardines, estos serán retirados excepcionalmente este año para evitar que durante la celebración del festejo pudieran verse dañados.

La decisión se ha tomado para preservar no solo el jardín, sino los mecanismos de riego. La plantación será retirada por lo tanto y también el entramado regante, y volverán a ser instalados nuevamente cuando finalicen las fiestas, según informaron las mismas fuentes. Solo en la plantación la inversión realizada alcanza los mil euros.

El próximo año, tanto este jardín, como el que rodeará el vallado más próximo a la embocadura de la plaza de la Madera (este no está aún montado y no se instalará hasta que pasen las fiestas) serán protegidos con armazones de madera o material similar durante las carreras del Toro Enmaromado y de los toritos del Alba. De esta forma se pretende no tener que desmontarlos cada año garantizando su protección al cien por cien.

Entre ambos vallados de la plaza de Santa María quedará en principio abierta al público la calle Herreros con fines evacuatorios en caso de que se produjera algún tipo de incidente en este tramo de la carrera.

El vallado de Santa María, al igual que el ya instalado en la salida de el Toril, es de abeto tratado. En conjunto todo el vallado lleva148 tablones, 48 pilastras, 192 falcas y herrajes especiales.

El lote de acero, que se utilizará para sustituir también el actual sistema de cierre de calles en el itinerario de los encierros durante las fiestas estará integrado por un total de 110 vallas con imprimación antioxidante y acabado en color granate. Ambos son de estilo Navarra, que a diferencia del estilo Pamplona, utiliza cuatro travesaños entre postes en lugar de los tres que se usan en el vallado pamplonica.

La Concejalía de Fiestas optó por este tipo de vallado de cuatro travesaños en lugar del de tres por razones de seguridad.