Los benaventanos honraron ayer a su patrona, la Virgen de la Vega con diferentes actos tradicionales que se han ido adaptando a los nuevos tiempos a lo largo de los años. El acto central, sin duda, es la procesión de la Veguilla que fue portada a hombros por representantes de las trece peñas oficiales de las Fiestas del Toro que han lucido en la mañana de ayer sus coloridos uniformes. El recorrido comienza desde el templo que alberga todo el año la imagen mariana, la iglesia de Santa María. Desde allí comienza un recorrido en el que las peñas van turnándose y que este año han apostado por guardar el respeto a esta procesión pidiendo constantemente silencio, durante la misma.

Coincidiendo con el lunes de Pascuilla se celebra esta tradición que recorre las principales calles céntricas de la ciudad.

La imagen salió de la iglesia de Santa María a una plaza recientemente reformada portada a hombros por los integrantes de la Peña Trevinca que este año celebra su cincuenta aniversario. Tras ellos el resto de representantes de las peñas. No faltaron las autoridades civiles, religiosas y de seguridad, ni tampoco las nuevas representantes de la Juventud y la Infancia que lucieron para la ocasión trajes tradicionales.

También acompañaron mujeres ataviadas con trajes típicos y la música de la banda Maestro Lupi. Las peñas siguieron un orden riguroso hasta llegar de nuevo al templo donde, esta vez, fueron los peñistas de Compadres los que la bailaron y la metieron de nuevo al templo. Esta peña también celebra este año su cincuenta aniversario.

Se celebró entonces la misa oficiada por el obispo de la Diócesis antes de dar a la petición del Toro en la Plaza Mayor,

Entre las autoridades presentaes el delegado de Gobierno, la consejera de Cultura y la presidenta de la Diputación que se ausentó de la misa, según explicó, por problemas que había habido en la Diputaicón de cortes de luz.