El Servicio Municipal de Intervención del Ayuntamiento de Benavente recomienda aplicar la Ley de Haciendas Locales y realizar una quita de 5,6 millones de deuda (impuestos, tasas, precios públicos, etc.) cuyo cobro se considera ya inviable. Este cometido, le corresponderá a la Tesorería del Ayuntamiento y afecta fundamentalmente al periodo comprendido entre los años 1992 y 2012, aunque también a los años 2017-2013 ambos incluidos.

La Concejalía de Hacienda acaba de cerrar la liquidación del presupuesto de 2018, en el que los derechos pendientes de cobro suman más de 7 millones de euros. Sin embargo, una gran parte de esta deuda se puede considerar ya incobrable, y es así desde hace tiempo.

El interventor municipal recoge en su informe que el importe de los derechos pendientes de cobro de difícil o imposible recaudación viene dado por la parte de la cuenta de «Provisión para insolvencias» que corresponde a derechos de carácter presupuestario o no presupuestario incluidos en el cálculo del remanente de tesorería.

Por ello, y en el caso de que no exista un seguimiento individualizado como es el caso, se determinará la provisión mediante estimación global del riesgo de fallidos, tal y como establece la normativa. El saldo de esta cuenta se abonará al final del ejercicio con cargo a la cuenta «Dotación a la provisión para insolvencias», y se cargará al final del ejercicio por la dotación realizada al cierre del ejercicio precedente, con abono a la cuenta de «Provisión para insolvencias aplicada».

En la actualidad, dado que la contabilidad municipal arroja una cifra elevada de derechos pendientes de cobro de ejercicios cerrados (6,8 millones en el año 2017, y 7.5 en 2018), "algo fuera de lo ordinario que merece la pena poner de manifiesto en este informe; por esta Intervención se ha decidido minorar dicha cantidad en la de 5.626.430,53 euros".

La Ley de Haciendas Locales establece que los ayuntamientos deberán informar al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y a su Pleno, u órgano equivalente, del resultado de la aplicación de los criterios determinantes de los derechos de difícil o imposible recaudación con unos límites mínimos.

La propuesta del técnico pasa por realizar una quita del 100% de esta deuda, por incobrable, en el periodo comprendido entre los años 2012 y 1992. La minoración de la deuda será del 75% los años 2014 y 2013; del 50% en el año 2015, y del 25% entre los años 2016 y 2017. Esta regla viene marcada por ley y en el Ayuntamiento benaventano no se ha aplicado durante muchos ejercicios como se debía.

Con todo, la situación financiera municipal está muy lejos de ser mala. La deuda de la Administración local con los bancos era de 8,3 millones a 31 de diciembre de 2018, lo que equivale al 55,47% de los derechos reconocidos netos. La cifra es prácticamente la mitad del límite máximo de endeudamiento permitido a los ayuntamientos, un 110%. La carga financiera municipal es en la actualidad7,34% de los recursos ordinarios de 2018.