María Josefa Alfonso Pimentel Téllez de Girón, condesa-duquesa de Benavente, regresó ayer, aunque solo fuera por evocación, a la fortaleza en la que vivió antes de que los ingleses la prendieran fuego, de la mano de la historiadora Paloma Fernández-Quintanilla y del CEB Ledo del Pozo. La IX Duquesa de Osuna. Una ilustrada en la Corte de Carlos III, es el título de la conferencia impartida por Fernández-Quintanilla en el salón del artesonado del hoy Parador Nacional de Turismo Fernando II. Sobre la ilustrada benaventana, una de las damas más interesantes y sofisticadas de las Cortes de Carlos III y Carlos IV, no se había vuelto a escribir desde 1955. En su estudio, y ayer en su charla, la historiadora desveló el interés por el arte de la noble benaventana que fue una adelantada a su época interesándose e impulsando entonces las experimentaciones más modernas sobre la lactancia infantil, la vacunación de la viruela o la reducción de la mortalidad.