Medina del Campo acogió anoche la presentación de la Semana Santa de Benavente en un evento organizado por las Juntas Pro Semana Santa de ambas ciudades bajo el lema "La queremos compartir". El acto comenzó a las ocho de la tarde en la Ermita Nuestra Señora del Amparo con una breve presentación que dejó paso a la proyección de un audiovisual sobre la Semana de Pasión benaventana y a la inauguración de una exposición fotográfica que permanecerá activa hasta el domingo.

Según el presidente de la Junta Pro Semana Santa de Benavente la muestra pretende "compartir la fe y la devoción por el Misterio; mostrar la herencia histórica y cultural de nuestro pueblo; e invitar a toda una experiencia turística en nuestra ciudad".

La exposición está integrada por 31 fotografías correspondientes a las diferentes procesiones en las que se reflejan momentos singulares de cada una de ellas y también la diferente imaginería y grupos escultóricos.

Con esta presentación y con la exposición fotográfica y audiovisual la Junta Pro Semana Santa busca también dar a conocer fuera de Benavente el valor de la Pasión local en el periplo iniciado en los últimos años para conseguir la declaración de Interés Turístico Regional.

La exposición recoge momentos procesionales glosados sobre el Domingo de Ramos; la Procesión de las Tinieblas; la Procesión del Silencio el miércoles santo; la procesión de la Santa Vera Cruz el jueves; El Encuentro, la mañana del viernes santo, el "Recorrido de Oración al Santísimo Cristo de los Afligidos" al mediodía, y la Magna Procesión del Santo Entierro por la noche. También y por último la Procesión del Resucitado el Domingo de Resurrección.

También incluye fotografías detalladas de la imaginería local que se puede ver en las procesiones. esto es, un compendio de las diferentes etapas históricas y gustos estéticos por los que ha discurrido a lo largo de su historia. Según glosan las notas a la metra, se pueden observar retazos de sabor medieval (Ecce Homo) y ruralizante (El santísimo Cristo de los Afligidos), tallas del siglo XVI y XIV respectivamente, junto a otros cargados de efectismo barroco (Rodopelo, conocido popularmente como "El judío del Clavo") del escultor Ramón Álvarez.

También figuran las imágenes de devoción, como son las de Jesús Nazareno y del Santísimo Cristo de la Salud, ambos del siglo XVI, que cuentan con sendas cofradías centradas en su culto. Del siglo XVII destaca la piedad atribuida a la escuela Vallisoletana.Del siglo XIX las tallas como nuestra señora de las Angustias o la Virgen de Soledad muestran atavíos con doseles al estilo andaluz, y en el XX varias obras del afamado escultor valenciano Pío Mollar, como son El Yacente, La Oración del Huerto y la Virgen de los Dolores, obras que se caracterizan por el colorido y la luminosidad levantina.

Por último, en los años cincuenta, nuevas aportaciones muy significativas vienen a engrosar el patrimonio de la Semana Santa Benaventana, como el grupo escultórico del Calvario, llamado también la Cuarta Palabra, el Flagelado o Cristo Atado a la Columna, obra esta última del escultor benaventano José Alonso Coomonte. Jesús en la borriquilla de la casa bocacha de Olot, la Verónica y el Resucitado de los talleres Calderot de Madrid. La última adquisición data de 1995: El San Juan y la Virgen en el Sepulcro obra de Ricardo Flecha.