La Consejería de Cultura y Turismo ha encargado prospecciones en el ámbito de cuatro túmulos dolménicos de la comarca de Benavente para comprobar o descartar la posibilidad de hallar nuevos restos en el radio de influencia de los ha descubiertos.

El Servicio de Planificación y Estudios de la Consejería sacó a licitación los trabajos en el marco de un programa comunitario transfronterizo sobre prehistoria e invitó a presentar ofertas a cinco empresas especializadas, de las cuales solo dos elevaron finamente plicas. El trabajo ha sido encargado a la empresa Strato Gabinete de Estudios sobre Patrimonio con un presupuesto de 15.980 euros, impuestos incluidos.

El objeto de este contrato menor es investigar la realidad arqueológica, el estado de conservación y posibilidades de valorización de cuatro yacimientos de esta tipología ubicados en la zona norte de la provincia de Zamora, y concretamente en la comarca de Benavente y Los Valles, que es dónde más restos dolménicos han sido hallados en el territorio provincial.

En concreto la investigación, que se limitará a realizar prospecciones en un amplio radio alrededor de los dólmenes ya conocidos, se localizará previsiblemente en los túmulos de San Adrián y de las Peñezuelas, en Granucillo de Vidriales; en El casetón de los moros, en Arrabalde; en Piedra Hincada, en Brime de Urz; y en El Tesoro, en Morales de Rey, aunque además de estos dólmenes hay castros y yacimientos prehistóricos localizados en Cubo de Benavente, Piedra Ficada; y en Manganeses de la Polvorosa, La Corona-El Pesadero.

Estas prospecciones tendrán en cuenta los hallazgos realizados en los años treinta del siglo pasado por el padre agustino César Morán, que descubrió entre otros el dolmen de San Adrián y de las Peñezuelas en Granucillo de Vidriales.

La investigación pretende servir para determinar si alrededor de los dólmenes ya conocidos hay restos de otros túmulos que , dada la actividad agrícola en estas áreas de los Valles, pudieran haber quedado sepultadas, o en su defecto detectar la existencia de yacimientos de esa etapa de la prehistoria. Los trabajos, que se han encargado sin una garantía de hallazgo previa, tendrán una duración de un trimestre, según recogen la condiciones del contrato de adjudicación a la firma Strato.