El Plan de Fomento Territorial de Benavente promovido por la Consejería de Economía de la Junta de Castilla y León contará en teoría con partidas para la mejora de infraestructuras y con financiación para nuevas actuaciones encaminadas a la generación de riqueza y de captación de empresas. En el primer apartado, tal y como avanzó ayer este periódico, se incluirá la construcción de un nuevo aparcamiento de vehículos pesados en 18.000 metros cuadrados de suelo municipal en el Benavente II, y la sustitución de las luminarias convencionales por tecnología led, pero también la renovación del firme de todas las calzadas del Centro de Transportes, de parte del Benavente II y el tramo benaventano de la carretera de San Cristóbal de Entreviñas.

Además de las acciones complementarias del parking de camiones y de la sustitución del alumbrado, el Ayuntamiento remitirá a la Junta una memoria ya finalizada con el arreglo del pavimento de once calles del CTLB, esto es, calle Simón Bolívar, calle Oporto, calle Viñas, calle Vila Real, calle Bolivia, calle Panamá, calle Paraguay, calle Brasil, calle Ermita de San Lázaro y Avenida de las Américas, además de la antigua salida a San Cristóbal hasta el límite con la localidad vecina. El coste de esta actuación, de la que ya existe una separata de proyecto, asciende a 984.000 euros, que se sumarían a los 1,9 millones de las acciones mencionadas. Al margen de ellas estaría la construcción de una nueva nave logística en el Centro de Transportes, en cuya memoria trabaja ya la sociedad pública.

Todos los planes de fomento territorial que está desarrollando la Consejería de Economía de la Junta contemplan un apartado de financiación de infraestructuras existentes y un bloque de fondos superiores para nuevas acciones inversoras encaminadas al fortalecimiento económico de cada zona.

En el caso del Plan de Fomento Territorial (o de reindustrialización) de Benavente la mayor parte de la inversión se la llevaría, también en teoría, el desarrollo del Benavente III al otro lado de la autovía siguiendo el modelo del estudio de viabilidad encargado por el CTLB a la consultora ARUP.

En el primer bloque se han incorporado también la reforma de todos los viarios por razones de necesidad derivados del mantenimiento. Según los documentos técnicos (tanto el proyecto como la memoria), en la mayoría de estos viales hay deterioros importantes relacionados con el tráfico pesado y con los efectos climatológicos y el paso del tiempo. Remozar todas estas conexiones es una cuestión que el Ayuntamiento, accionista mayoritario del CTLB, considera urgente.

Dado que estos planes se están desarrollando con carácter plurianual, al menos a tres años vista, la intención del Ayuntamiento es que la Junta acometa primero las acciones complementarias y se centre en el Benavente III en la segunda y en la tercera anualidad.

El modelo de desarrollo propuesto en el estudio de mercado, que ya conoce la Junta, plantea destinar entre 15 y 20 hectáreas a logística de transporte y comercio para dar continuidad a la oferta del CTLB; entre 25 y 25 hectáreas para logística de consumo en un momento de oportunidad clave para atraer empresas como Inditex, Mercadona y Decathlon, "que han puesto sus miras expansivas en la zona noroeste peninsular"; y entre 3 y 5 hectáreas para logística de producción con el objetivo de ofertar una zona de grupaje y de distribución al sector lácteo provincial.

El emplazamiento se centra en el sector norte del plan Benavente III, que hubiera sido la quinta y última fase que se hubiera llevado a cabo. Las otras cuatro fases del sector sur resultarían inviables económicamente debido a los grandes costes de urbanización y de dotación de infraestructuras que conllevaría su desarrollo, y apuestan por el sector norte redefinido en varias fases.