Más de tres siglos y medio ha logrado mantenerse y adaptarse a los tiempos la devoción por la Virgen del Carmen en Benavente que sigue viva y activa gracias a la cofradía con origen en el siglo XVII en la ya desaparecida parroquia de San Andrés, integrada por más de 600 personas que la convierte en la más numerosa de la ciudad.

Este año la celebración en torno a la festividad del Carmen ha estado cargada de actos culturales, que se han sumado a los religioso en los que fieles y devotos se acercan cada día a la iglesia para compartir vivencias con la Madre, con motivo de la celebración de los 50 años de la parroquia del Carmen al servicio de la comunidad. Los actos religiosos llegaron ayer a su culmen con la celebración del Rosario de la Aurora, a las siete de la mañana, y la procesión, tras la misa solemne de la tarde, con la imagen del Carmen, muy venerada en la ciudad y titular de la iglesia de Santa María del Carmen de Renueva.

Sobre las nueve y media de la noche dio comienzo este concurrido acto religioso organizado por la Cofradía del Carmen que desde el año 2008 ha recuperado parte del antiguo trayecto por las calles de la zona del templo de la Virgen del Carmen de Renueva. La procesión estuvo encabezada por la cruz parroquial, seguida de los niños y niñas que este año han hecho la Comunión y que realizaron el recorrido portando sendas imágenes y vistiendo con pétalos de flores el asfalto por el que pasaban. Tras la imagen mariana, completaron la procesión las autoridades religiosas y políticas y los músicos de Maestro Lupi.

La imagen marinera, una talla en madera policromada destinada a ser vestida, obra del imaginero zamorano Ramón Álvarez hacia 1874, fue la gran protagonista de esta centenaria procesión.