El Ayuntamiento de Benavente, a través de las concejalías de Seguridad Ciudadana y Medio Ambiente, y ante las quejas planteadas por distintos colectivos vecinales pondrá en marcha una campaña de control de los animales de compañía para perseguir conductas incívicas de los propietarios de animales de compañía.

Desde el gobierno municipal ya se ha dado orden a la Policía Local para que se fijen, durante los tres turnos operativos, controles en las zonas urbanas para identificar y denunciar a los propietarios que incumplan las ordenanzas municipales y la normativa autonómica que regula la materia, especialmente en lo relativo a la identificación mediante microchip, el control de los animales, la obligación de llevar a los perros atados en la vía pública y la recogida de los excrementos en la vía pública para ser cumplida por los propietarios de mascotas cuando sean sacados a pasear por las calles, plazas, parques y jardines públicos.

La normativa autonómica de carácter general y la normativa municipal obligan a los propietarios de animales domésticos, y especialmente de perros, a disponer de los documentos sanitarios y de identificación del animal, llevarlos con correa y provistos de bozal cuando la peligrosidad del animal o las circunstancias sanitarias así lo aconsejen. Igualmente, en materia de higiene, los propietarios han de llevar consigo una bolsa o cualquier otro dispositivo para garantizar la recogida de los excrementos que depositen y su eliminación de la vía pública, tal y como recoge la normativa municipal vigente (ordenanza sobre animales de compañía y la ordenanza cívica).

Con esta campaña de vigilancia y control se pretende sensibilizar a la ciudadanía y erradicar un problema que no sólo supone una mala imagen de la ciudad, sino, ante todo, un problema de limpieza, higiene y comodidad para los ciudadanos. "Es una llamada de atención ante la actitud irresponsable de un número reducido de propietarios de animales de compañía que permiten que los excrementos de sus mascotas se depositen en la vía pública y no cumplen con la obligación cívica de recogerlos", señalan desde el equipo de gobierno.

Desde el Ayuntamiento se han dado órdenes a la Policía Local para que sean muy estrictos con el cumplimiento de estas normas y que se vigile intensamente, incluso por agentes de paisano, los espacios públicos de la ciudad, pudiendo imponer multas cuyo importe, según las circunstancias y su calificación, podrían ascender hasta los 750 euros.

Fruto de la colaboración de las concejalías de Medio Ambiente y Obras se han creado dos zonas acotadas en el Prado de Las Pavas y en la zona del Camino de Castropepe para el esparcimiento y suelta de perros dando cumplimiento a una reivindicación histórica del colectivo de propietarios de estas mascotas; así como han sido distribuidos portabolsas para facilitar la obligación de recoger los excrementos.

El Ayuntamiento apela a la colaboración ciudadana y a la sensibilización de todos los propietarios de mascotas, esperando que "la ciudadanía tome conciencia del problema y contribuya a atajarlo, inclusive, denunciando y señalando los perjudicados a los autores de tales conductas incívicas que vulneran el derecho de todos a disfrutar de una ciudad limpia", apostillan desde el equipo de gobierno.