Benavente despide hoy las Fiestas del Toro con la carrera del segundo Torito del Alba, que protagonizará esta vez el astado de pelo burraco de la ganadería El Montecillo, "Bohemio". Llegará este mediodía al toril, donde no habrá la posibilidad de verlo como ocurre con el toro protagonista del festejo, el del miércoles de la Semana Grande. Y es que la intención de la Concejalía de Fiestas es, precisamente, no restar protagonismo al festejo de ese miércoles.

La envergadura del animal, no obstante, no hace honor a su denominación ya que este toro de más de tres años pesa unos 450 kilos. Aunque no se reciba con todos los honores, como el toro y el torito del miércoles, se mantiene el resto del festejo tradicional. De modo que se respeta el recorrido tradicional y los itinerarios alternativos, las normas de la carrera y el horario límite, así como lo relativo a las medidas de seguridad y sanidad que serán similares a las del astado protagonista de la carrera de la tarde del pasado miércoles.

El toro, saldrá a la calle a las siete y media, tras las tres bombas anunciadoras, tras el pasacalles de peñas que recorrerán el centro urbano con sus charangas desde los Paseos de la Mota, Plaza Juan Carlos I y calle Sancti Spiritus por Candil, La Madera y Ronda Rancha, para terminar en la Plaza de San Antón. Además, vuelven a ofrecerse unos 125 asientos en la grada portátil situada en la calle Las Eras.

En la tarde de ayer, los protagonistas fueron otros. Los toros del cajón que por quinto año consecutivo organiza la asociación taurina Charamandanga y que se saldaron sin tener que lamentar heridos por asta de toro.

La desencajonada de los V toros de los Condes Duques de Benavente permitió mostrar a algunos mozos su habilidad frente a los astados, no faltaron algunos cortes y también algún intento de dar capotazos. Lo cierto es que el espectáculo dejó toda la emoción en varios puntos del recorrido, pero por momentos se hizo una carrera muy lenta.

El primero de los toros del cajón en salir a la calle fue "Alariko", de la ganadería Jara de Retamar, y no logró llegar hasta el toril viejo sin la ayuda de los cabestros que la organización se vio obligada a sacar a la calle antes de esperar a que el toro "se rompiera". En el tramo recorrido sí dejó algún incidente en calle Sancti Spiritus donde empotró a varios mozos contra la valla. En pocos minutos volvió el espectáculo de la mano de "Jamonero", de Enrique Serrano, que hizo una carrera limpia dejando lucir grandes cortes, con aplausos incluidos durante su recorrido.

Volvieron a salir a la calle también los novillos del segundo encierro urbano.