Hacendero el torito de la ganadería Ignacio López-Chaves que protagonizó ayer la carrera del torito del alba de estas fiestas logró hacer el recorrido completo en poco menos de medio hora.

Desde las nueve y media de la mañana los aficionados a este festejo se dieron cita en el entorno del toril para ver la salida del astado, uno de los momentos más esperados pero que este año no contó con la aglomeración de ediciones pasadas y no hubo dificultad para hacerse un hueco tras el vallado oficial. La maroma salió del toril recibiendo los aplausos de los asistentes y en apenas dos minutos sonó la tercera bomba que anunció la salida impetuosa del astado.

Hacendero con su rápida carrera logró hacerse hueco nada más salir y provocó un susto en la subida hasta la calle Matadero al arremeter contra un imprudente corredor, en la zona de las talanqueras del graderío de la calle Las Eras. La embestida quedó en un susto, según la concejal de Fiestas, que aseguró no había que lamentar heridas de consideración.

Los mozos y mozas aficionados del festejo aguantaron la carrera del astado que en algunos tramos, como en la subida de la Cuesta del Río, se vio obligado a parar para desenredar la maroma de un árbol.

Después continuó la carrera por calle Los Carros y Santa Clara para completar el recorrido con todos los descansos marcados. "El novillo ha sido un acierto, antes se traían vacas que eran eralas y este año hemos apostado por un macho para que diera más juego y para que pasara lo que ha pasado hoy, que llegara al matadero tras un recorrido limpio y sin percances de consideración".

Éste ha sido el primer enmaromado de las Fiestas del Toro que ha corrido bajo la nueva ordenanza.