El año 2017 es el año más seco y el más cálido en Benavente, de los últimos catorce años, atendiendo a los datos registrados por la estación meteorológica del colegio Virgen de la Vega. De modo que en 2017 llovieron 229,2 litros por metro cuadrado a lo largo de 34 días, lo que supone un 33,76% menos de agua de lluvia que la media de los últimos 14 años situada en los 346,04 litros por metro cuadrado. Con relación al año más lluvioso de este periodo, el 2013, el descenso de las lluvias ha sido de un 56%.
Estos datos presentan a nivel local lo que es una tendencia global, que "nos sitúa en una etapa histórica caracterizada por un cambio climático, aumento de la temperatura y una disminución apreciable de las precipitaciones", según el profesor Gabriel Pérez Aguado, del Departamento de Ciencias de este centro educativo.
Atendiendo a los datos recabados mensualmente en esta estación, el mes de septiembre, con 0,8 litros por metro cuadrado, se convirtió en el más seco del año, después de unos meses de julio y agosto con nada de lluvia durante 48 días. Mientras que febrero, con 67.2 litros caídos por metro cuadrado y siete días de lluvia, fue el que acumuló más precipitaciones.
En cuanto a la temperatura, también es el año 2017 en Benavente el más cálido de los últimos años, superando en 1ºC la media registrada en la estación meteorológica.
El mes más caluroso fue julio con una temperatura media de 22,4º. El día 1 de este mes la máxima no alcanzó los 9 grados, mientras que el día 16 se situó en los 36,4ºC a las 19:45 horas. No obstante el día más caluroso del año fue el 18 de junio, en que se alcanzaron los 37,9º a las 19:45 horas. En cuanto al mes más frío fue enero, con temperatura máxima de 9,4 grados y la mínima situada en nueve grados bajo cero.
"El inmenso deshielo ártico del pasado año 2017 junto con los efectos de la baja actividad solar, Mínimo Solar que según la NASA se alcanzará en el 2020, está provocando que este invierno sea el de mayor intensidad en el Hemisferio Norte, tal como pronostica el Efecto Ártico (Erik Quiroga), con temperaturas árticas similares a las que se dieron en la Pequeña Edad de Hielo (S. XIV - S. XIX)", explica el profesor de Ciencias.
"Las consecuencias afectarán a la calidad de vida de las personas, comprometiendo bienes e infraestructuras. Concienciar a los alumnos sobre el cambio climático y sus efectos, debe ser una prioridad en el ámbito educativo", añade.
Con este objetivo el colegio Virgen de la Vega comienza una serie de actuaciones y proyectos relacionados con el consumo responsable del agua, seguimiento de las manchas solares y la observación fenológica de los ciclos biológicos de plantas y animales, relacionados con la meteorología y el clima, y las alteraciones provocadas por el cambio climático.
