Desde el mes de febrero, la Diócesis de Astorga comienza a aplicar un protocolo para evitar y prevenir los posibles abusos a menores y saber cómo actuar ante ellos. "Tenemos que vivir sacando lecciones de lo que ha pasado y prevenir a la infancia", declaró ayer monseñor Juan Antonio Menéndez en referencia a los casos ocurridos hace décadas en el seminario de La Bañeza.

Una medida de obligado cumplimiento para todos los responsables de la pastoral que tengan contacto con pequeños y adolescentes y que se traduce, en primer lugar, en la exigencia diocesana de un certificado de carecer de antecedentes de delitos por abusos.

El obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez, insistía ayer en este tema con motivo del encuentro organizado en Ponferrada con periodistas. A preguntas de los informadores monseñor Menéndez quiso remarcar que lo sucedido hace décadas "no tenía que haber sucedido, pero en la actualidad la infancia sigue siendo vulnerable y hay que protegerla".

Una firme postura del prelado expresada ya a través de una exclusiva entrevista realizada a este periódico el pasado 9 de diciembre e insistiendo en el caso ya cerrado, aunque hay en curso una investigación bajo secreto pontificio con referencia a casos de presuntos abusos cometidos en el colegio Juan XXIII de Puebla de Sanabria y también en el seminario de La Bañeza.

El prelado astorgano acudía ayer al Bierzo para mantener un desayuno informativo con motivo de festejar al patrón de los periodistas, san Francisco de Sales, en una cita anual que se ha venido organizando en los dos años anteriores desde su toma de posesión, en el palacio episcopal de Astorga, y en esta ocasión se hacía en la vicaría de Ponferrada, en el edificio Domus Pacis de la capital berciana.

El prelado asturicense no quiso pasar por alto el mensaje del Papa Francisco para la 52 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales que en esta ocasión lleva por título: "La verdad os hará libres".

En este sentido, monseñor resaltó que el mensaje del Pontífice tiene una clara intención: "tomar conciencia de una nueva realidad en la información provocada por las fake news ( noticias falsas) un fenómeno que se debe atacar con la búsqueda y presentación de la verdad". En este sentido ha recordado que "las noticias falsas son informaciones infundadas, basadas en datos inexistentes con la finalidad de engañar al lector y conseguir algún logro político o económico".

El obispo de Astorga quiso mostrar respeto y admiración por todos los profesionales de los medios de comunicación a quienes ha recordado que "los periodistas realizáis, no solo un trabajo profesional, sino una misión: ser custodios de las noticias. La verificación de las fuentes y la custodia de la comunicación son verdaderos procesos de desarrollo del bien que generan confianza y abren caminos de comunión y de paz".

En el transcurso del encuentro informativo, monseñor adelantó la inmediata reorganización de casi el millar de parroquias. "En esta Cuaresma haremos una encuesta sociológica y eclesiástica en las parroquias para que se cuestionen su futuro y tomen conciencia de la realidad", decía el prelado haciendo hincapié en la despoblación del medio rural y la avanzada edad de los feligreses, así como de la falta de fe y, por supuesto, la escasez de párrocos muchos de ellos ya mayores. En el desayuno informativo, el prelado astorgano estuvo acompañado por el vicario episcopal del Bierzo- Galicia, F. Javier Redondo, del párroco de Cacabelos y colaborador de la delegación de Medios, Jesús Álvarez, y de la delegada de Medios de Comunicación del Obispado, María Ángeles Sevillano.