Poner el Belén es para muchos uno de las tradiciones navideñas más entrañables y en Benavente también se apuesta cada año por contar con la representación del Nacimiento para la visita y disfrute del público. El lugar elegido por el Ayuntamiento de Benavente vuelve a ser el Centro Cultural Soledad González, en una sala de la primera planta. Pero en esta ocasión no ha sido la Asociación Belenista de la Morana la encargada de realizar esta representación, sino un representante de la Asociación Cultural La Folguera, de Tábara, Carlos Fresno.

"Llevo veinte años viviendo en Benavente y diecisiete montando el Belén y propuse a la concejala de Cultura hacerlo yo este año y aceptaron mi propuesta", explicó el responsable de la creación.

La presentación de este Belén no tiene apenas iluminación para dejar ver la iluminación propia de la creación, en la que el fuego, y las antorchas de las casas presentan una luz tenue que hacen más atractivas las escenas.

"Siempre tienes un estilo propio, que se ve con los años. Yo comparado con el profano en esta lides estoy a años luz, pero no dejo de ser un profano en esto y en esta provincia hay gente muy buena que hace belenes. Si algo me distingue a la hora de montar los belenes es que cualquiera que hago, sea grande o pequeño, tiene iluminación propia. Soy profesor de electricidad y quizás sea por eso. Las luces las antorchas son latas, hechas a mano una por una y toda la iluminación es LED", aseguró el creador.

En un espacio de 3,70 metros por 1,20 de profundidad, Fresno ha dejado plasmada su imaginación a través de estructuras realizadas a base de porexpan, una capa de escayola y pintura. "El atrezzo está todo realizado de modo manual, pero las figuras, que la verdad, no he contabilizado, son compradas en Benavente en distintos establecimientos comerciales, todo autóctono".

Destaca en la creación la representación del Castillo de Herodes, "con toda la parafernalia", según explica "y lo demás, he pretendido representar el entorno de aquella época, sin tampoco demasiado rigor histórico. Es más fruto del gusto propio. Románico, gótico, ideas que van surgiendo sobre la marcha a raíz de una idea general. Lo importante es plasmar un día cualquiera en la vida de Belén". En un recorrido visual por el Nacimiento no se observan las habituales escenas como la Anunciación, pero sí está la Adoración de los Reyes Magos.

Quizás su interés por la música tradicional, ha llevado a Fresno a representar en esta creación cuatro gaiteros; está el herrero, otro lugareño acarreando grano, los pastores de cabras y los de ovejas, una escena de una señora lavando a un niño, una embarazada, los puestos del mercado, "el día a día", puntualizó.

Un trabajo que le ha llevado en torno a dos meses y medio de dedicación aunque, según explica, "realmente los que estamos metidos en el mundillo no dejamos de pensar en ello todo el año".

El Belén está abierto hasta el día 5 de enero, en horario de mañana y tarde, de lunes a viernes y de mañana, los sábados.