Miguel Martínez | Becado: "El equilibrio entre talento y esfuerzo te lleva a lograr tus metas"

-¿Qué es el Aula de Verano Ortega y Gasset?

-Se trata de una semana cultural y científica realizada en Santander, dónde se reúne a los 100 mejores expedientes de todos los bachilleratos de España. En la que asistí hubo ponencias sobre temas concretos de los más diversos ámbitos, desde Medicina, hasta Filosofía, pasando por Historia, Cooperación Internacional, Economía o Inteligencia Artificial, entre otros. También se organizaron eventos culturales como la visita al Palacio de Sobrellano, en Comillas o la asistencia al Teatro Casyc de Santander para ver una obra del famoso actor catalán Albert Boadella. Todo ello estuvo financiado por la beca de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

-¿Cómo vivió esa experiencia?

-Definiría mi experiencia como enriquecedora, al estar en un lugar donde pude compartir tiempo con gente que tiene las mismas inquietudes. Muchas de esas personas probablemente elegirían la misma carrera que yo. Otras me enseñaron cosas que no conocía.

-¿Y cuál es esa carrera va a realizar?

-Elegí el Grado de Medicina de la Universidad de Salamanca, por ser una carrera con un campo de visión más global, para luego especializarme en lo que a mí verdaderamente me interesa, que es la Investigación Biomédica.

-¿Qué sintió al recibir este pre mio tras el esfuerzo de dos años de Bachillerato?

-La verdad es que fue toda una recompensa, no solo por los dos años del Bachillerato, sino también por todo el camino recorrido en cuanto a la formación a largo plazo. Estar después de todo ello en el Aula de Verano te anima y te reconforta al pensar que has podido llegar hasta allí después del esfuerzo. Mi nota media de Bachillerato fue de 9,94. Había mucha gente con un 10 de media y por ello la nota de corte creo que quedó en un 9,9 para la carrera que yo voy a estudiar, Medicina.

-¿Le costó mucho conseguirla?

-La verdad es que conlleva sacrificios. Son horas y horas de estudio, un hábito que tienes que tener no solo durante el Bachillerato sino también en cursos anteriores para poder llegar a Bachillerato de la mejor forma posible. Hay gente que tiene talento, otra saca las cosas a base de esfuerzo y hay que intentar hacer balanza entre ambas cosas.

-¿Qué es lo más importante a tener en cuenta a la hora de estudiar para conseguir un buen rendimiento?

-Saber lo que quieres e ir a por ello, dedicarle horas. La verdad es que si tú sabes cuál es tu meta y sabes que si te esfuerzas podrás conseguirla, las horas de estudio se te hacen más amenas. Estudiar duro no es para sacar buena nota, sino para llegar a ser lo que quieres ser.

-Ese esfuerzo le valió para la asistencia al Aula de Verano, ¿qué actividad de las realizadas le llamó más la atención?

-Dentro de las ponencias destacaría la de Medicina de Precisión en Oncología, que me llamó la atención porque fue bastante técnica y precisa sobre todo el campo oncológico y los estudios del cáncer. Como voy a estudiar Medicina me atrajo ese tema, pero también reconozco que soy una persona con muchas inquietudes literarias y el teatro de Albert Boadella también me gustó mucho. Es importante no quedarse solo en un campo del conocimiento y aprender de otros diferentes. La multidisciplinariedad es importante para la actividad profesional, todas las carreras deberían tener contenidos de otras.

-Hay una creencia entre la población de que la mayoría de becas y premios van destinados a los estudiantes de Ciencias o Tecnología. Estando allí entre los mejores, ¿percibió eso?

-En el Aula de Verano había más de 30 estudiantes que van a estudiar Medicina. Pero también había gente de Sociales y Humanidades. Por ejemplo la Filosofía es muy importante en cualquier carrera y había alumnos que estudiarían Traducción.